Testa y Vallehermoso no notan el cambio de ciclo

El presidente de Sacyr Vallehermoso se descuelga del huracán corporativo que parece sacudir los mercados. Según sus propias palabras, “Testa y Vallehermoso son como el cariño verdadero, ni se compran ni se venden”. Los resultados del área inmobiliaria del grupo, referentes al ejercicio 2006, ofrecen argumentos suficientes para mostrarse optimistas ante el futuro. La cifra de negocio conjunta de las dos sociedades ha crecido un 2,8% respecto al año pasado, hasta alcanzar los 1.497,9 millones de euros. El beneficio antes de impuestos (Ebitda) se situó en los 521,2 millones de euros, lo que supuso un incremento del 17,9%, mientras que el beneficio neto alcanzó los 280,3 millones, lo que representa una mejora del 34% respecto al ejercicio 2005.
A pesar de la elevada deuda del grupo y de que ambas compañías acumulan unas plusvalías latentes de 4.841 millones, de acuerdo con la última valoración de activos realizada por CB Richard Ellis, el máximo ejecutivo del grupo desmintió la posibilidad de que se pongan a la venta. Respecto a las previsiones de cara al próximo ejercicio, Del Rivero aseguró que “Testa incorporará activos y tendrá un crecimiento orgánico que le permitirá incrementar su cifra de negocio entre un 5% y un 10%, mientras que el crecimiento de ese parámetro en Vallehermoso rondará en 2007 el 5%, debido a los retrasos en la concesión de licencias de primera ocupación propios de un año electoral como éste”.
Respecto a la posible expansión de la actividad, más allá de la presencia de Testa en París y Miami, el presidente de Sacyr ha descartado estar estudiando posibilidades de promoción en Europa del Este o Alemanía, países que han despertado el interés de otras compañías competidoras. La estrategia del grupo es mantener diferenciadas las actividades de promoción y patrimonio, por lo que no está previsto unificar Vallehermoso y Testa, ni tampoco sacarlas a Bolsa.