así se ve
lunes 20 de octubre de 2014, 14:42h
Solidario. Federico Ferrando se considera una persona afortunada. Cree que la vida le ha dado lo principal: "la satisfacción de haber formado una familia y tener unos hijos". Su inquietud pasa por la solidaridad con quienes no han tenido su suerte. Así, tiene muy claro que cuando madure quiere dedicarse a algo más social e incluso participar en organizaciones no gubernamentales para ayudar a los que lo necesitan o a asesorar a los jóvenes empresarios. De momento, se conforma con trabajar en proyectos geriátricos.
La sucesión. Gesfesa es una compañía familiar, pero que antepone la profesionalidad a la relación consanguínea. Es por ello que Ferrando no está preocupado por la sucesión de la empresa. "Tengo tres hijos y no me inquieta que ninguno siga mis pasos -afirma-. El mayor es educador social, el segundo estudia Arquitectura y la pequeña está haciendo Empresariales, aunque dudó al elegir esta carrera, porque también quiso estudiar Psicología", otra de las pasiones del padre.
La psicología. La comunicación y el trato humano es una de las cosas más importantes en el ámbito de los negocios, según Ferrando. Además, este empresario confiesa que "el ser humano como tal, me encanta". Por ello, asegura que, de no haber entrado en el mundo inmobiliario, se hubiese decantado por la psicología. "Observar como puede evolucionar una persona desde una postura de abandono hasta la de responsabilidad es maravilloso y está muy ligado al mundo empresarial", afirma.
La vivienda. Para un experto en el sector inmobiliario como Federico Ferrando, una casa tiene que ser "cómoda y cálida", cualidades ambas que cumplen las dos viviendas que tiene este empresario. Su chalé de la montaña está montado de forma minimalista "porque es la propia montaña la que lo envuelve todo". En cambio "en la casa de la ciudad cuidamos más los detalles, porque en ella se buscan los rincones donde poder leer o escuchar música".