La Administración italiana vuelve a obstaculizar la fusión entre Autostrade y Abertis

Desde un primer momento, Di Pietro habló de una revisión de los contratos que se establecen entre las concesionarias de autopistas y el Estado, por considerarlos gravosos para la Administración y perjudiciales para los usuarios. Por aquel entonces, durante el verano, el ministro llegó a decir que se avecinaban “tiempos duros” para las concesionarias y que se les acababa una época de grandes ganancias a causa de esta situación desigual. Siguiendo esta línea, aparece ahora una nueva normativa sobre estos contratos que, tras la reciente aprobación del Gobierno, tendrá que pasar por el Parlamento para su ratificación.
El nuevo modelo de contrato, varía considerablemente el mecanismo para calcular las tarifas y también influye en la recogida de beneficios, condicionada a la inversión en infraestructuras realizada por la empresa concesionaria. De este modo, el Gobierno quiere garantizar que las empresas inviertan el dinero prometido en la mejora o realización de las redes viarias (esta es, de hecho, una de las acusaciones recurrentes de Di Pietro a Autostrade: no haber hecho las inversiones prometidas durante estos años, a pesar de conseguir grandes beneficios). Las concesionarias tampoco podrán modificar las tarifas, si no cumplen con los compromisos de inversión adquiridos con el Estado. Por último, otra de las modificaciones en los contratos, sería la de no permitir que el derecho a voto de las constructoras en el accionariado de concesionarias supere el 5% (norma, esta, directamente orientada al caso de ACS dentro de la fusión entre Autostrade y Abertis, anticipándose a la decisión que tome la Comisión Europea, quizás la próxima semana, sobre el veto italiano a la operación).
Con todas estas medidas, el Gobierno italiano sigue dificultando una fusión que cada vez parece más complicada, ya que la nueva reglamentación puede tener un efecto directo sobre el valor de Atostrade en el mercado, que ya cayó un 3% tras conocerse la noticia.