Sierra norte, sierra pobre
A la sierra norte de Madrid la llaman la sierra pobre. Esto se debe, entre otras cosas, a que ha estado perjudicada a la hora de conseguir ayudas y subvenciones para desarrollar su potencial.
La sierra norte madrileña destaca por su belleza, posee riquezas monumentales y artísticas y tiene grandes posibilidades de atracción turística. Todo depende de los planes que se planteen, y de los presupuestos necesarios para llevarlos a cabo.
Un ejemplo, en este sentido, puede ser el desarrollado en los municipios del sur, que han pasado a ser beneficiados en infraestructuras y equipamientos, y en fomento de la actividad empresarial a todos los niveles: industrial, comercial de servicios, y a la implantación de importantes centros de enseñanza superior. Todo ello les ha permitido no sólo igualar, sino hasta superar a otras zonas de la Comunidad de Madrid. El crecimiento constante de la población lo hacía necesario.
El caso de la sierra norte es muy distinto. Salvo excepciones, sus municipios son pequeños, su población escasa y sus necesidades actuales se centran más en sobrevivir que en crecer. Parece llegado el momento de que esta zona deprimida de nuestra Comunidad reciba de las autoridades regionales la atención que merece. En el nuevo Plan de Estructuras para el presente año y 2007 se van a destinar 23 millones en infraestructuras, la mayoría para mejorar las existentes, pero también se prevé la construcción de 14 centros sociales,11 instalaciones deportivas y cuatro colegios. Quizá lo mas importante para la zona sea la construcción de un Centro de Especialidades Médicas, que estará ubicado en Buitrago de Lozoya, aunque la petición partió de la Cabrera. En esta población se edificará uno de los tres centros de urgencias hospitalarias.
Son pasos positivos, aunque insuficientes, para una zona necesitada de atención especial si quiere mantenerse con dignidad en el conjunto de pequeños municipios de la Comunidad madrileña. Una zona que, por sus características naturales, la calidad de su medio ambiente, y las posibilidades turísticas, puede y debe tener futuro.