Las cuatro desaladoras insulares se iniciarán en septiembre

Andratx, Santa Eulalia, Alcúdia y Ciudadela son los cuatro municipios elegidos para levantar las cuatro desaladoras baleares. Los proyectos han terminado su información pública y actualmente se está terminando de contestar las alegaciones, que se enviarán al Gobierno balear y se presentarán automáticamente a Bruselas, según ha explicado el secretario general para el Territorio y la Biodiversidad, Antonio Serrano.

Cambios.- Como consecuencia de los procesos de información pública, se examinará la pertinencia de realizar algún tipo de modificación a los proyectos. En concreto, Serrano ha citado el caso de la desaladora de Alcúdia, donde ha habido bastantes alegaciones, que obligarán a modificar la parte del proyecto que hace referencia a las conducciones, modificando el importe del volumen total de la obra.

El consejero de Medio Ambiente balear, Jaume Font, ha explicado que el problema reside en que la conducción de agua, en su recorrido hacia Pollença, pasa junto a la reserva natural de Sa Bufareta. Por ello, se ha designado un trazado alternativo que no dañe el entorno y se ha alcanzado una solución que, según Serrano, evitará las expropriaciones de terrenos.

Ahora sólo falta la formalización administrativa del convenio, necesaria para el funcionamiento de las desaladoras, que Serrano espera se realice “rápidamente”, para que se puedan poner en marcha algunas de las actuaciones a partir del próximo mes de septiembre.

Las interconexiones, que tardarán dos años en realizarse, costarán 28 millones, que se financiará al 50% entre la Administración estatal y la insular.

Las tres obras de interconexión, declaradas de interés general, figuran en el Plan Hidrológico Nacional. Se trata de la interconexión entre Consell y S’Estremera, que permitirá la llegada de agua a Sa Costera y crear un eje norte-sur y oeste de Mallorca interconectada; la interconexión de Santa Eulalia de Ibiza a San Josep y San Joan; y la de San Ferrán en Formentera hasta La Mola.