el búho/ Lope de Aguirre
Legalizar un picadero

La sociedad Marbur, dedicada curiosamente al alquiler de automóviles, ha recibido luz verde de la Consejería de Medio Ambiente de la Comunidad de Madrid para legalizar el picadero construido en una zona de protección general del municipio de Navalcarnero y cuya tramitación se ha venido demorando desde el año 2000, cuando la Dirección General de Urbanismo dictó un informe favorable, y que luego hubo que adaptar al nuevo PGOU.
Aunque la actividad caballar entra entre las permitidas, con condiciones, en las zonas de reserva, el problema es que cuando se solicitó el permiso, las edificaciones ya se habían construido y el negocio estaba en plena fase de explotación.
El que sí tienen un problema es el alcalde de Villanueva del Pardillo, Juan González Miramón, que quiere resolver de una vez por todas el caso de la UE 4, cuya reparcelación lleva coleando desde el año 2001, cuando la Comisión de Gobierno aprobó el proyecto, que sufrió duras críticas por parte de algunos propietarios: Sánchez Tejera y Torras Huguet, entre otros, que obligaron a rectificar la idea inicial un año después. Se produjeron entonces nuevas alegaciones por parte de los mismos propietarios, que en su mayor parte han reiterado sus protestas, hasta que la Junta de Gobierno local ha decidido dar su aprobación definitiva rechazándolas. El asunto puede acabar en los tribunales.