El AVE entre Madrid y Lisboa se considera un “proyecto prioritario”
La Unión Europea invertirá 220.000 millones en infraestructuras hasta 2020
lunes 20 de octubre de 2014, 14:42h
Sólo una de las conexiones internacionales de España vía AVE, la que unirá Madrid con la capital lusa, estará incluida entre los proyectos prioritarios de la Unión Europea. La puesta en marcha de las distintas actuaciones de esta lista, en la que se fijan 29 ejecuciones de infraestructuras hasta el año 2020, supondrá una inversión de 220.000 millones de euros, que tendrán que estar financiados en un 80% antes de 2006.
Lucía Sierra
Bruselas
La Comisión Europea se ha propuesto que todos los países de la Unión mejoren sus transportes y sus infraestructuras, un factor decisivo para impulsar el intercambio económico y cultural entre los distintos estados miembros.
La única forma de hacer realidad aquella promesa de convertir la UE en “la zona más dinámica del mundo” es incrementando la inversión, fundamentalmente en dos áreas: las infraestructuras y la investigación y el desarrollo (I+D).
En lo que respecta a España, entre los 29 proyectos que la Comisión tiene previsto llevar a cabo hasta el año 2020 no está incluido el AVE que conectará con Francia, pero sí figura la línea de alta velocidad Madrid-Lisboa. De los demás proyectos considerados como prioritarios, destacan la construcción del puente sobre el estrecho de Messina, el desarrollo de las autopistas del mar, la línea ferroviaria entre Bruselas y Estrasburgo y las conexiones Berlín-Verona y Tallín-Viena.
El coste total previsto para los trazados más necesarios se ha disparado un 40% respecto al presupuesto planificado en 1996, alcanzando los 220.000 millones de euros y, aunque la UE se concede un plazo de 16 años para rematar las obras, las dificultades de financiación convierten, por el momento, el futuro mapa de comunicaciones casi en una utopía contra reloj, ya que el 80% de las inversiones deberían ponerse en marcha antes de 2006.
Para poder hacer frente a las inversiones que supone la ejecución de estos proyectos, Europa ha modificado el reglamento que hasta ahora limitaba al 10% de su coste la financiación comunitaria de las redes transeuropeas, ampliándolo hasta el 30%. Además, Bruselas ha propuesto que hasta el 20% del presupuesto sea asumido por el sector privado.