Las acciones de Evergrande, el gigante inmobiliario chino, cayeron más del 20% en bolsa debido a una investigación sobre su filial Hengda Real Estate. La empresa no puede cumplir los requisitos para emitir nuevos pagarés y ha reevaluado los términos de la reestructuración de su deuda. Evergrande ha enfrentado problemas financieros en los últimos años y solicitó protección bajo el Capítulo 15 de la Ley de Quiebras de Estados Unidos.
A las 8.30 horas de este lunes, las acciones de Evergrande, el gigante chino inmobiliario, experimentaron una caída en Bolsa superior al 20%, situándose en 0,44 dólares hongkoneses (0,052 euros). Esto se debe a que el grupo anunció que no puede cumplir los requisitos para emitir nuevos pagarés, ya que su principal filial, Hengda Real Estate, está siendo investigada.
En la sesión de este lunes, los títulos de la compañía asiática han sufrido una caída del 24%, lo que ha llevado a otras inmobiliarias como Country Garden (-8,6%) y al propio Hang Seng, el indicador principal de la Bolsa de Hong Kong, a perder un 1,6%.
"Con cautela" es la recomendación de Evergrande a los titulares de valores de la empresa y a los inversores potenciales de la misma al momento de negociar con las acciones de la compañía.
Hace unos días, la inmobiliaria reconoció que las ventas del grupo no han cumplido las expectativas. Después de consultar con sus asesores y acreedores, la empresa reevaluará los términos de la reestructuración de la deuda extranjera anunciada en marzo pasado para adaptarlos a la situación real de la sociedad y a las demandas de los acreedores.
Evergrande anunció que no celebraría las reuniones que había convocado para este lunes y martes en relación con la reestructuración de su deuda, en estas circunstancias.
En marzo pasado, se dio a conocer un plan de reestructuración de la deuda 'offshore' de la promotora china. En ese momento, la deuda ascendía a unos 140.284 millones de yuanes (17.702 millones de euros). Este plan contemplaba diversas medidas, como el canje de la deuda por nuevos pagarés de la empresa con diferentes vencimientos.
Evergrande dijo entonces que la reestructuración propuesta aliviará la presión de endeudamiento en el extranjero de la compañía y facilitará los esfuerzos para reanudar las operaciones y resolver problemas en el país.
La compañía china ha admitido que, debido a la investigación sobre su filial Hengda Real Estate, no puede cumplir con los requisitos para emitir nuevos pagarés.
En los últimos dos años, se han acumulado los problemas de Evergrande. Hace poco, varios directivos de su filial Evergrande Financial Wealth, propiedad al 100% del grupo, fueron detenidos por la Policía china.
En 2021, Evergrande atrajo la atención cuando se descubrió que varios empleados habían amortizado productos de gestión de patrimonios antes de las fechas establecidas. Sin embargo, posteriormente fueron amonestados y se les exigió que devolvieran los fondos.
Solicitó la protección del Capítulo 15 de la Ley de Quiebras de Estados Unidos la empresa el pasado 18 de agosto, con el objetivo de proteger los bienes de la compañía en Estados Unidos, mientras se gestionan los acuerdos de reestructuración de la empresa en Hong Kong y las Islas Caimán.
Después de 17 meses suspendida de cotización, Evergrande regresó a Bolsa el 28 de agosto. Durante ese tiempo, la compañía publicó sus cuentas atrasadas de los ejercicios 2021 y 2022, revelando pérdidas por un total de 581.211 millones de yuanes (equivalentes a 73.369 millones de euros al cambio actual).
Incumplió el plazo autoimpuesto para dar a conocer a finales de 2022 su plan de reestructuración el gigante inmobiliario chino, acuciado por las dificultades para hacer frente a un pasivo estimado en unos 300.000 millones de dólares (275.665 millones de euros).