Representa el 10% de parque total de viviendas
El mercado de viviendas en alquiler cae un 14,6% en 2002, hasta 2,15 millones
lunes 20 de octubre de 2014, 14:42h
El Banco de España ha confirmado que sigue manteniéndose la tendencia hacia la vivienda en propiedad en detrimento de los inmuebles en alquiler, mercado que se ha reducido un 14,6% durante el pasado año con respecto a 2001. Según los datos de la entidad, el número de viviendas en alquiler se ha situado en 2,15 millones de unidades.
La viviendas en renta han pasado a representar el 10% de parque total de viviendas, frente a la tasa del 11,5% que suponía en 2001.
Esta caída se ha producido a pesar del crecimiento del 3,69% que registró el número total de viviendas durante el pasado ejercicio, cuando se alcanzaron los 21,58 millones de unidades en nuestro país.
La mayor parte de las nuevas viviendas se destinaron al uso en propiedad. Así, este tipo de casas pasaron de sumar el 82% en 2001 a representar el 84,3% en el pasado ejercicio. A finales del año pasado existían en España un total de 18,19 millones de viviendas en propiedad, un 7% más que las existentes en 2001.
El parque residencial en nuestro país ha crecido un 46,5% entre 1981 y 2002, al pasar de los 14,76 millones de unidades que se contabilizaban a comienzos de la década de los ochenta, hasta los más de 21,58 millones que existen en la actualidad.
Por contra, el porcentaje de pisos en alquiler se ha reducido a la mitad, al pasar a suponer un 10% del total, desde el peso del 20,8% que ostentaba en 1981. En cesión y otras formas de posesión se encuentran 1,24 millones de viviendas, un 5,7% del total.
Según los datos del Banco de España, el porcentaje de viviendas en alquiler viene descendiendo en España desde la década de los setenta, cuando suponía casi la tercera parte del total, un 30,1%, hasta la mencionada tasa del 20,8% de 1981, el 15,5% que representaba en 1991 y el 10% de 2002.
Durante las pasadas elecciones autonómicas y municipales, se habló de buscar medidas para promocionar las viviendas en alquiler, penalizando fiscalmente a las viviendas vacías, llegando a la expropiación, y también la creación del alquiler social.