La demanda en el mercado logístico de Madrid se contrajo un 50% en 2009
Las dificultades económicas y el exceso de espacio retrasan muchos proyectos
lunes 20 de octubre de 2014, 14:42h
08/03/2010.- El mercado logístico de Madrid está marcado por las circunstancias económicas y financieras de los últimos años, principalmente por las dificultades de financiación y el descenso del consumo. Durante el año 2009 la demanda se contrajo considerablemente respecto a los anteriores periodos, y registró un descenso de la contratación de más del 50% respecto a 2008. La demanda, que el año anterior empezó a trasladarse a áreas más descentralizadas gracias a las rentas más bajas y las nuevas promociones, comenzó en 2009 a interesarse de nuevo por las zonas más céntricas, gracias al ajuste de precios y los atractivos incentivos ofrecidos por los propietarios.
Las dificultades económicas y el exceso de espacio disponible retrasan y paralizan muchos proyectos, en algunos casos indefinidamente, a la espera de conseguir financiación, un inquilino seguro, o un proyecto llave en mano, según el último informe del mercado logístico de DTZ.
Este retraso en las promociones provocará una escasa salida al mercado de nuevo espacio logístico en el corto-medio plazo. Los precios continuaron su descenso en 2009, y se ajustó a las condiciones del mercado, para tratar de incentivar la demanda. Además de la bajada nominal de las rentas, se potenciaron los incentivos, especialmente los periodos de carencia y la calidad y terminación de las instalaciones.
Durante el año 2009 se contrataron alrededor de 190.000 m2 de superficie logística en el mercado de Madrid, lo que supuso un descenso considerable respecto al año anterior.
La demanda de espacio logístico se concentra principalmente en las poblaciones del noreste (a lo largo de la A-2), tanto en la provincia de Madrid como la de Guadalajara, y en el sur (alrededor de la A-4), en las provincias de Madrid y Toledo, donde muchas zonas tradicionalmente industriales se transformaron en logísticas en los últimos años.
Los posibles inquilinos demandan espacios cada vez más completos, mejor equipados, con mayor calidad y mayores periodos de carencia. Con la llegada de las dificultades económicas se redujeron las operaciones de compra, debido a la escasez de financiación, y se prefirió la opción del alquiler e incluso la de alquiler con opción a compra.
Se espera que la demanda empiece a recuperarse poco a poco a lo largo de 2010, fomentada por la bajada de las rentas, el aumento de espacio disponible, y las mejoras de los incentivos por parte de los propietarios, que ofrecen fórmulas cada vez más variadas y atractivas.
La oferta de espacio logístico disponible ha aumentado considerablemente en los últimos 2 años, y ha registrado a finales de 2009 niveles de disponibilidad de alrededor del 7%, frente a un 4% de un año antes. Este aumento de espacio se debió principalmente a la fuerte promoción de naves logísticas en los años previos de bonanza, que supusieron un alto volumen de espacio y salieron al mercado en un momento en que la demanda empezaba a debilitarse. También afectó la desocupación de algunas naves por parte de sus inquilinos.
Actualmente la promoción de naves logísticas es prácticamente nula. Muchos proyectos ya planeados o incluso comenzados, se han parado o retrasado, en algunos casos indefinidamente, a la espera de una mejora en las condiciones económicas y de financiación. Los propietarios y promotores no están dispuestos a construir a riesgo, por lo que las pocas promociones que se comienzan son para proyectos llave en mano, o cuando se tiene un inquilino asegurado. En algunos casos incluso se ha puesto a la venta el suelo
Durante el año 2009 las rentas de naves logísticas disminuyeron considerablemente respecto a los años anteriores, y se ajustaron así a las condiciones del mercado, donde el aumento progresivo de la disponibilidad, la caída de la demanda y las dificultades económicas contraían el número de operaciones.
Además de la bajada de rentas, los propietarios han recurrido a otras fórmulas para intentar incentivar la demanda, y ofrecen incentivos cada vez mayores y más variados, como mayores periodos de carencia, ayudas para la implantación, instalaciones más completas, etc.
Para los próximos periodos se espera que las rentas continúen su ajuste a la baja inicialmente, si bien en el medio plazo podrían comenzar a estabilizarse.