Las oficinas refuerzan sus precios incrementando su inversión medioambiental
Los promotores asumen el sobrecoste para dar mejor salida a sus productos
lunes 20 de octubre de 2014, 14:42h
24/11/2008.- La obligación de adecuar las nuevas oficinas al Código Técnico de Edificación llega en un momento adverso para el sector inmobiliario, pero muchas promotoras confían en que el esfuerzo les permita poner en el mercado sus productos en mejor situación que las oficinas sin adecuación ambiental. Uno de cada cinco empresarios cree que la sostenibilidad les permitirá elevar el valor del inmueble.
El Código Técnico de Edificación (CTE) es una exigencia positiva, pero exige un sobre esfuerzo que llega en un momento difícil. Esta es la principal conclusión de un estudio realizado por la Asociación Española de Oficinas (AEO) y el estudio de arquitectura GOP Oficina de Proyectos.
A pesar de los reparos que despierta la nueva normativa ambiental, los promotores de oficinas han decidido apostar por el punto de vista positivo, para afrontar los cambios. Jorge Zanoletti, presidente de la patronal de oficinas, afirma que "muchos ven en el CTE un aliado para el sector, ya que ayudarán a captar inquilinos e incrementará el valor de un edificio". En este sentido, uno de cada cinco directivos de promotoras de oficinas piensa que la incorporación de medidas de sostenibilidad les permitirá sostener los precios en un momento en el que las negociaciones con los clientes se hacen cada vez más arduas.
En este sentido, Zanoletti afirma que "salvar un cuartillo en el precio de alquiler supone mantener entre un 15 y un 20% del beneficio de un activo. En caso de incorporar innovaciones medioambientales podemos afrontar este periodo con la esperanza de lograr rentabilidades de entre el 7 o el 8%":
Obviamente, los que prentendan apostar por el medio ambiente tienen que pagar un precio. Equipar a los edificios con medidas y criterios sostenibles exige un esfuerzo extra, que se refleja en una inversión más cuantiosa. La mitad de los encuestados calcula que el sobrecoste está entre un 6 y un 12%, frente a un 4,2% que opinan que el aumento de costes oscilaría entre un 0 y un 3%.
Eduardo Montero, socio director de GOP, afirma que la experiencia permitirá reducir los costes de las oficinas sostenibles, situándolos por debajo del 6%. Frente a este aumento de la inversión inicial, los propietarios e inquilinos de los nuevos inmuebles podrán reducir su factura energética, lo que tendrá una repercusión inmediata sobre los costes fijos de las empresas. Ventajas como esta están en la base de la creencia de los promotores de que unas oficinas sostenibles facilitarán el alquiler a terceros, una posibilidad que ven muy factible el 23% de los empresarios. La respuesta a estas previsiones, en unos pocos años.