LA OPORTUNIDAD ESTÁ EN LA CRISIS
José Carlos Sanz
Consejero delegado de Mace Management Services
Aún con la prudencia obligada por la situación del momento, considero que el sector del project management debe afrontar el futuro con mucha calma y con buenas perspectivas.
Es evidente que nos encontramos en una situación de crisis en el sector inmobiliario. Sin embargo, ya he oído muchas veces la expresión “es una crisis rara”. De hecho, mientras el impacto se está notando de una manera importante en el sector residencial, hay otros muchos sectores que no se están viendo tan afectados por la situación. Se habla de un "efecto dominó", pero tengo mis dudas sobre que esto pueda producirse.
Actualmente se están desarrollando proyectos de centros comerciales, hoteles, parques industriales, sedes sociales, complejos de ocio, hospitales, colegios, residencias... : el project management tiene y tendrá trabajo, y mucho. A mí me gusta emplear, en lugar de la expresión anglosajona, la española “Gestión y Dirección de Proyectos y Obras”, pues creo que define mucho mejor nuestra actividad. En estos momentos, hay muchos proyectos y obras que gestionar y dirigir, lo que plantea un futuro prometedor a nuestro sector.
En Mace pensamos que debemos afrontar la situación actual de una forma positiva, enfocándolo como una oportunidad que debemos aprovechar. Mientras que el boom inmobiliario de los pasados años ha permitido que la fuerte demanda y la escalada de precios compensara errores de proyecto, desviaciones de plazos y presupuestos y, en algunos casos, falta de calidad, las circunstancias actuales no van a dejar que esto vuelva a suceder.
El objetivo del project management no es otro que el cumplimiento de los plazos y de los costes de construcción de un producto final con los requisitos técnicos y de calidad adecuados. Si gestionamos los proyectos de una forma correcta; si aportamos al proceso el orden que permita una buena coordinación entre todos los agentes que intervienen (promotor, arquitecto, contratistas, ingeniería, organismos oficiales, usuario final...); si contamos con la experiencia obtenida en diferentes proyectos que nos enseñan qué se debe hacer y, lo más importante, qué no se debe hacer; si tenemos la flexibilidad y la anticipación que nos haga ir por delante de la obra y del proyecto; y si disponemos de la capacitación técnica necesaria para anticipar soluciones, alternativas, métodos constructivos y propuestas que permitan construir lo que el cliente quiere y como lo quiere, y en el plazo y coste que necesita, entonces habremos conseguido aprovechar esta oportunidad que nos brinda la situación actual.
Para ello, es evidente que tenemos que estar preparados y contar con los sistemas y -lo más importante- las personas con la capacidad, el conocimiento y la experiencia adecuados y necesarios para gestionar los proyectos y las obras, y hacerlo muy bien.
En ese sentido, es importante destacar que mientras que el project management se ha visto afectado durante estos últimos años por el intrusismo de compañías no especialistas que nos han hecho mucho daño, la situación actual nos va ayudar pues se obliga a la profesionalización. Por ello, quiero invitar a todas las empresas del sector a trabajar en pos de esta profesionalización que el mercado nos impone.