Estancado en los 130.000 metros cuadrados
Construmat estanca su crecimiento a la espera de la ampliación de la Fira, en L'Hospitalet
lunes 20 de octubre de 2014, 14:42h
El salón Construmat, el segundo más importante de Europa en su sector, espera con impaciencia la ampliación del recinto ferial de Gran Via, en L'Hospitalet. De la construcción de los nuevos pabellones depende su crecimiento, estancado en los 130.000 metros cuadrados de superficie.
Construmat abrirá las puertas el próximo día 26 y lo hará sin incrementar su superficie ni un sólo metro cuadrado respecto a su última edición, en 2001. Y no es por falta de demanda. "No hemos podido atender las peticiones de nuestros expositores, que, de promedio, reclamaban un diez por ciento más de superficie de la que les hemos podido ofrecer", explicaba ayer el presidente de Construmat, Bruno Figueras, que este año se estrena al frente del principal salón español, en sustitución de Josep Blanchart, que abandonó el cargo el año pasado tras doce años como presidente.
Como en la edición de 2001, el salón internacional de la construcción volverá a ocupar al completo los dos recintos de Fira de Barcelona -Montjuïc y Gran Via-, que quedarán unidos a través de dos lanzaderas de autobuses. Los organizadores esperan la ampliación del recinto de L'Hospitalet de Llobregat (Gran Via) para no perder su liderazgo en España y su coliderato en Europa, que comparte con Batimat, el salón parisino de la construcción.
Figueras espera crecer en las dos próximas ediciones, en paralelo a la construcción de cuatro nuevos pabellones en el recinto de Gran Via. Incluso, baraja la posibilidad de centralizar todo el salón en L'Hospitalet en 2007, cuando la ampliación esté concluida y sus seis pabellones aglutinen una superficie de exposición de alrededor de 150.000 metros cuadrados.
Construmat contará en esta edición con 4.033 expositores y un amplio abanico de representación internacional: 1.369 empresas procedentes de 48 países. La organización espera que las visitas se reduzcan al público profesional, lo que reduce las posibilidades de mejorar la cifra de visitantes de 2001. Figueras vaticinó un número de 230.000 personas para esta edición. De momento, el sistema de preacreditaciones puesto en marcha por Fira de Barcelona ha recibido ya 76.619 peticiones, de las que 2.643 proceden del extranjero.
El impacto económico de la celebración de Construmat está estimado en torno a 150 millones de euros, sobre todo por los gastos generados en transporte, comercio y hostelería. El sector hotelero prevé plena ocupación por la celebración de la feria, que afectará a los establecimientos tanto de Barcelona como de su área metropolitana.
El salón acogerá la ceremonia de entrega del premio de arquitectura contemporánea de la Unión Europea-Premio Mies van der Rohe, al que se han presentado 269 obras. Entre los finalistas se encuentran ocho arquitectos españoles, que optan a un premio de 50.000 euros. El arquitecto español Rafael Moneo, por el diseño del Palacio de Congresos Kursaal de San Sebastián, fue el ultimo vencedor del premio, hace dos años.
Apuesta por el desarrollo sostenibleEntre la veintena de sectores que estructuran Construmat este año aflorará uno nuevo, dedicado a la construcción sostenible. A pesar de ser un segmento muy poco desarrollado - casi inexistente en España-, la organización ha optado por adelantarse al futuro y erigir el salón barcelonés como un referente europeo del desarrollo sostenible ligado a la construcción. "Queremos ser un foro de debate y un embrión", señaló ayer Bruno Figueras, que advirtió de la conveniencia de que tanto constructoras como fabricantes opten por esta fórmula de negocio para reducir el impacto sobre el medio ambiente. Junto a este ramo incipiente, Construmat ofrecerá por seguna vez su poyecto Casa Barcelona, una innovadora aportación que permite adecuar la vivienda a las condiciones climáticas y de forma de vida propias de los países mediterráneos. Los proyectos de este año se centran en reclamar a la industria que adapte sus productos a mejorar sustancialmente la calidad de la vivienda.