Maquillaje

La ya ex ministra de Vivienda, María Antonia Trujillo, no parecía sospechar la que se le avecinaba cuando reía en el transcurso del Debate del Estado de la Nación las ocurrencias de su líder y presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, en su enfrentamiento con el presidente del Partido Popular, Mariano Rajoy. Se le veía feliz y ni se le pasaba por la cabeza que unas horas más tarde iba a recibir la comunicación de su cese al frente del Ministerio que tantos quebraderos de cabeza le había producido.
En todas las crisis de gobierno anteriores siempre había estado en las primeras posiciones de salida aunque, al final, siempre había visto renovada la confianza presidencial. Pero ha podido comprobar en sus carnes de ministra cómo las gasta Rodríguez Zapatero. La necesidad del presidente del Gobierno de poner en marcha una auténtica operación de maquillaje político con la que recuperar la etiqueta de progresista hizo que Trujillo cayera en la red de la crisis. La vivienda es una de las primeras preocupaciones de los ciudadanos y siempre es protagonista de las propuestas electorales. Si a esto le añadimos la necesidad de Zapatero de contar con el voto catalanista para intentar revalidar la mayoría, aunque sea relativa, de cara a las próximas elecciones generales ya tenemos todos los ingredientes que dieron con la salida de Trujillo. Ya sabemos que, para Zapatero, el fin justifica los medios caiga quien caiga.
El balance de Trujillo al frente de Vivienda no ha contentado prácticamente a nadie. Los promotores no están nada contentos con la Ley del Suelo que ha promovido y que acaba de entrar en vigor. Los ciudadanos, en general, no han percibido que sus políticas de vivienda se hayan traducido en facilitar el primer acceso y eso se ve en su valoración en los análisis realizados por el Centro de Investigaciones Sociológicas. Por no hablar de la Sociedad Pública de Alquiler que no ha aportado los resultados esperados a pesar del presupuesto empleado. Al final, Trujillo va a pasar a la historia por la ministra de los minipisos y la que regalaba zapatillas a los jóvenes para facilitarles la búsqueda de vivienda.