La falta de suelo en las dos ciudades aleja a los operadores
Redaccion | Lunes 20 de octubre de 2014
23/03/2007.- Los dos principales mercados logísticos del país (Madrid y Barcelona) siguen presentando una oferta de producto importante insuficiente para cubrir la demanda. Valencia, tercer mercado, podrá afrontar la demanda gracias a los nuevos desarrollos.
La falta de producto lleva a los grandes operadores a buscar otras ubicaciones, más alejadas de los centros urbanos, en torno a Madrid y Barcelona, principales mercados españoles. Según el último informe de coyuntura de la consultora inmobiliaria King Sturge sobre el sector, el segmento logístico continúa, no obstante, siendo muy solicitado por los inversores, ya que, a pesar de la importante presión a la baja, las rentabilidades, entre el 6% y el 6,75% en el caso de Madrid y algo más reducidas en el caso de Barcelona, siguen siendo de las más altas del sector inmobiliario.
Según Pedro Baamonde, consultor de logística de King Sturge, Madrid, que es un polo de atracción para las empresas, se está convirtiendo en “un polo de repulsión”, en referencia a que los operadores optan ya por ubicar sus instalaciones en provincias limítrofes, más que en las de la propia capital, a causa de la falta de producto. La demanda de los operadores logísticos en torno a Madrid, suele superar los 10.000 metros cuadrados, por lo que les es muy complicado encontrar emplazamientos adecuados. Baamonde habló también de los nuevos mercados que están surgiendo, especialmente Zaragoza, gracias al interés y el apoyo de la administración autonómica, y Sevilla, con un puerto fluvial muy dinámico.
Por otra parte, los responsables del segmento logístico de la consultora en Barcelona y Valencia, presentaron dos situaciones muy diferentes en estas ciudades. Por un lado, Agustí Llobregat, el encargado de la Ciudad Condal, habló, principalmente, de la falta de suelo, a causa de la ubicación de la propia metrópoli, entre la costa y la montaña. Por eso opina que, a pesar de sus reticencias, los operadores tendrán que empezar a situarse en zonas algo más alejadas del puerto y el aeropuerto (áreas más valoradas en esta ciudad), especialmente en torno a la autopista A-2, donde la disponibilidad es algo mayor y las comunicaciones con esos dos centros neurálgicos son muy buenas. La demanda en Cataluña, en las cercanías de Barcelona, es muy intensa: “”se alquila todo; antes de que se vaya un operador ya hay cola para ocupar ese almacén”, afirma Llobregat. La oferta futura cambiará gracias al desarrollo del cuarto cinturón que, no obstante, todavía no ha empezado.
En Valencia, se da una situación muy diferente. Según la opinión de Juan Collado, responsable de logística de la zona, esta parte con retraso respecto a las dos grandes ciudades del país, pero ya se desarrolla con fuerza, gracias, entre otras cosas, a tener el segundo puerto de España, después de Algeciras. “A diferencia de Barcelona, Valencia cuenta con oferta de suelo”. Esto se debe al esfuerzo hecho por la Generalitat en nuevos proyectos, que supondrán la incorporación de más de un millón de metros cuadrados para instalaciones logísticas en la zona. Destacan los desarrollos de Massalavés y Ribarroja, y los promovidos por Mafort.