AUTONOMÍAS

ARAGON.- 20/03/2007 Un túnel subterráneo para sustituir la polémica glorieta de la MAZ

Redaccion | Lunes 20 de octubre de 2014
Ante los graves problemas de tráfico que se generan a diario en la zona, el Consejo de Ministros ha decidido adelantar sus planes y sustituir la conflictiva rotonda por una paso subterráneo, cuya obra ha sido presupuestada en 12,3 millones de euros y será licitada en breve.

El Consejo de Ministros ha decidido adelantar la partida presupuestaria para la realización de un paso subterráneo a la entrada de Zaragoza, por la carretera de Huesca, que evite los enormes atascos y las protestas vecinales que se iban produciendo en uno de los barrios de la ciudad en expansión. El presupuesto de la obra asciende, por ahora, a los 12,3 millones y su licitación es ya inminente.
El paso inferior previsto vendrá a sustituir a una polémica rotonda, construida en 2004, que poco a poco convirtió la entrada a la ciudad, a la altura de la Mutua de Accidentes de Zaragoza (MAZ), por la A-23, en un punto de continuas y kilométricas retenciones de tráfico para la zona de San Gregorio. Y ha sido precisamente esa razón la que ha impulsado que la Secretaría de Estado de Infraestructuras convenciera al Consejo de Ministros para adelantar hasta en dos años la partida prevista, y de mejorar también el presupuesto, inicialmente proyectado para 2008 y por diez millones de euros.
Según los actuales planes de las autoridades, el Ministerio también acelerará la licitación para que las obras pudieran comenzar este mismo verano.
El paso subterráneo dará acceso, además de a los cuatro ramales de entrada y salida a la autovía de Huesca, a la avenida de la Academia General Militar, al camino de servicio y al vial que dirige hacia Parque Goya y al Campus Río Ebro, algunas de las áreas metropolitanas en las que más ha crecido la población, y el tráfico. Además, el Ayuntamiento de la capital aragonesa prevé la creación de otras mil nuevas viviendas, lo que supondría el colapso definitivo de la circulación si se mantuviese la rotonda.
La obra autorizada por el Consejo de Ministros divide los trabajos en cinco actuaciones. La primera de ellas es el movimiento de tierras que deberá realizarse para el soterramiento del ‘tronco’ de la autovía. El paso tendrá dos calzadas con dos carriles de 3,5 metros, arcén exterior de un metro y construcción de los carriles de cambio de velocidad. Los cuatro ramales del enlace con la glorieta serán de cuatro metros de anchura y se limitarán, ya sea con arcenes y cuneta o con aceras.
Otras actuaciones previstas en la obra son la construcción de muros que hagan la función de pantallas laterales, la infraestructura para el drenaje y la reposición de las marcas viales correspondientes.