Oscar Alcaide

El gran número de operaciones corporativas que ha sacudido los mercados recientemente ha hecho que un grupo de expertos se hayan unido en un observatorio cuyo único objetivo es analizar el desarrollo de la legislación sobre ofertas de adquisición y las operaciones de este tipo que se produzcan en nuestro país. Con esa intención nace el Observatorio Español de Opas.
El escenario para este singular alumbramiento no fue otro que una jornada organizada por la Asociación Española de Accionistas Minoritarios de Empresas Cotizadas (Aemec), delante de juristas y expertos financieros de diversa índole y condición. Los padres de la criatura son Aldo Olcese y el decano del Colegio de Abogados, Luis Martí Mingarro. En opinión de estos dos afamados empresarios, la ebullición de la que estamos siendo testigos es sólo el principio de la integración europea, con movimientos comunitarios como principales protagonistas de un guión que aún está por escribir, y en el que los accionistas minoritarios han de defender su posición si no quieren quedarse como meros actores secundarios.
La asimetría regulatoria existente entre los distintos países de la Unión Europea en la transposición de la directiva comunitaria, hace que sea necesaria una entidad que analice las normativas que regulan nuestros vecinos en busca del modelo más apropiado para aplicarlo en España. La escisión de Metrovacesa en dos grandes compañías europeas del sector, la configuración de un nuevo gigante gracias al talento y habilidad de Luis Portillo y el posicionamiento en una retaguardia aventajada de la promotora que preside Enrique Bañuelos tendrán que hacer frente a un nuevo contexto en poco tiempo.
El proyecto de ley remitido al Senado obliga a lanzar una OPA por la totalidad si se supera el 30% de una compañía, y la mitad de los representantes en el Consejo de Administración. El nuevo marco trata de evitar que los minoritarios vean caer el valor de sus títulos ante la tendencia de tomar participaciones minoritarias, que evitan opas por la totalidad.