Urbanismo
Redaccion | Lunes 20 de octubre de 2014
La nueva Ley de Ordenación del Territorio servirá para incorporar al patrimonio de suelo público de la Generalitat los terrenos de propiedad privada localizados en un paraje natural o en sus límites y que cuenten con la calificación de suelo no urbanizable.
El objetivo del Ejecutivo es crear la figura del parque público natural, por la que dichas zonas serían susceptibles de albergar un área de esparcimiento público. La decisión del Gobierno representa el definitivo archivo de los intentos urbanizadores en zonas como el saladar de Agua Amarga o la desembocadura del río Algar, en Altea, aunque ha encontrado el rechazo de los grupos ecologistas.