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Un actor imbécil

Redaccion | Lunes 20 de octubre de 2014
El actor norteamericano Tim Robbins me parece un imbécil. Es el protagonista de la cinta ‘Atrapa el Fuego’, que abrió el primer Festival Internacional de Cine Solidario de Madrid (FISC Madrid) la pasada semana. Este es un festival que bajo un trasfondo solidario quiere demostrar, como llegó a asegurar Alberto Ruiz-Gallardón, que “el cine constituye un eficaz canal para transmitir
valores que contribuyan a transformar la sociedad”.

El cine Palafox y el Palacio de Congresos han ofrecido, con el apoyo de las principales asociaciones de profesionales que representan al cine español, cine bueno y comprometido por un euro. El actor norteamericano Tim Robbins acudió a la inauguración y se puso tonto con el alcalde y explicó que no había ido a hacerse una foto con un alcalde de derechas que no ha sido capaz de manifestarse contra el terrorismo. Todos sabemos que la disciplina de partido (¡por una vez que la ha tenido¡) ha sido lo que le ha impedido manifestarse contra el atentado de ETA.

Ignoro si el Robbins este ha cobrado por venir a inaugurar este ciclo de cine. Yo no le hubiera pagado por ingrato. El alcalde de Madrid no es de derechas ni de izquierdas cuando está defendiendo Madrid. Es el alcalde y merece el respeto de todos, incluido el de Tim Robbins que por mí se puede ir a su casa y no salir nunca.

Ser, o aparentar ser de izquierdas, no está reñido con la educación. Se puede llegar, saludar y decir lo que se quiera, pero no hacer gestos de desprecio hacia los madrileños cuando se critica de forma chulesca a alguien que no puede responder desde la libertad porque ocupa un puesto institucional elegido democráticamente por los ciudadanos.

Yo si fuera del Ayuntamiento preguntaría quien le ha explicado a Robbins quien es el alcalde, qué representa dentro de la derecha española y dentro de la estructura política. Esto les pasa a estos del PP por ir de progres y no darse cuenta que algunos de los actores llamados de izquierda tienen un discurso de subvención sin nada de educación.