Reflejos sinuosos para el cielo de Barcelona

19/09/2006.- El estudio de Enric Miralles y Benedetta Tagliabue firma un complejo de oficinas compuesto por tres volúmenes asimétricos y en perpetua transformación.

El skyline barcelonés pronto tendrá un nuevo fichaje singular para continuar la tendencia emprendida por la Torre Agbar y las instalaciones del Fórum. La nueva sede social de Gas Natural, que afronta la última fase de su construcción, nace con la intención de ser un nuevo hito de la modernidad que respete el espíritu de un enclave tradicional. No en vano, el terreno en el que se levanta el edificio, cercano al barrio de la Barceloneta, fue ocupado en su momento por la primera fábrica de gas de España y es uno de los activos más importantes en la historia de la empresa barcelonesa.
Gas Natural convocó en 1999 un concurso restringido a arquitectos locales para el diseño de sus oficinas centrales. El ganador fue el estudio de Miralles y Tagliabue, que cuenta en su currículum con los proyectos del Parlamento de Edimburgo y el mercado de Santa Caterina, en la misma Barcelona.
La propuesta vencedora se basa en la construcción de un complejo de tres volúmenes asimétricos. El primero de ellos, un edificio de cuatro alturas, conjuga con los edificios bajos de viviendas del barrio de la Barceloneta. Esta parte corresponde a un antiguo edificio de servicios técnicos de la compañía, que ha sido totalmente reformado para integrarse en el conjunto.
El segundo volumen del proyecto, y quizá el más característico, es un voladizo que comprende del piso 5 al 10. Por último, separada del resto por un saliente en forma de ménsula, una torre de veinte plantas se yergue del conjunto horizontal. El efecto que se pretendía con esta composición es que el volumen fuese aligerándose a medida que asciende.
Los tres volúmenes están recubiertos por una capa de cristal fabricada especialmente para este proyecto. La piel vítrea unifica las tres partes del complejo y aísla de la temperatura y el ruido exterior. Asimismo, el carácter reflectante de los cristales, éstos devuelven una imagen ligeramente deformada de la realidad. "La piel que cubre el edificio nunca es la misma, cambia en función de la luz, del tiempo que haga y del lugar desde donde observes el edificio. Se podría decir que el edificio está en completa metamorfosis", explica Tagliabue.
La nueva sede de Gas Natural, construida por Inmobiliaria Colonial, acogerá en breve a todo el personal administrativo que la empresa tenía repartido en varios inmuebles de la Ciudad Condal. Este proceso de concentración supondrá la jubilación de la tradicional sede de Porta del'Angel, que ha albergado las oficinas centrales desde el año 1895.