Redaccion | Lunes 20 de octubre de 2014
El noreste de la capital se está convirtiendo en un feudo de Florentino Pérez. Al desarrollo de Valdebebas, ACS suma la carga de trabajo que ha obtenido en el aeropuerto: reconstruirá el aparcamiento de la T4 y "lavará la cara" a las viejas terminales.
El aeropuerto de Madrid parece una mina inagotable para ACS, que se ha convertido en la constructora más activa por el momento en Barajas, con contratos valorados en cerca de 55 millones de euros. Después de haber sido uno de los principales agentes en la construcción de la T4, proyecto que acaparó la mayor parte de los seis mil millones de euros de la ampliación del aeropuerto, la primera constructora del país seguirá prestando sus servicios en la zona durante, al menos, nueve meses más.
ACS acaba de adjudicarse la reforma interior de las terminales más antiguas, por 30,2 millones de euros. En concreto, el importe de la remodelación interior se divide en 19,3 millones para la Terminal 1 y en 10,9 millones para la Terminal 2, mientras que las obras en exteriores y fachadas, valoradas en 4,9 millones de euros, corren a cargo de la empresa Copasa.
El concurso para la renovación de las terminales concitó gran interés entre las constructoras, como demostró la presentación de una veintena de ofertas, entre las que figuraban las de las empresas más importantes del sector. Finalmente, ACS se llevó los concursos más importantes, gracias a unas rebajas de entorno al 30%.
Las recientes adjudicaciones se unen al contrato de reconstrucción del Módulo D del aparcamiento, destruido por el atentado de ETA, a finales de diciembre. AENA ha elegido a Dragados, la filial de ACS que construyó en su día el aparcamiento de la T4, para reconstruir el edificio. El contrato está valorado en 24,5 millones de euros y tiene un plazo de ejecución de siete meses, a partir del desescombro total de la zona.
El peso de ACS en el aeropuerto madrileño podría crecer a corto plazo, ya que la constructora que preside Florentino Pérez ha presentado una oferta para construir la línea férrea que llevará el Cercanías hasta la T4. El concurso, valorado en 166 millones de euros, ha concitado también el interés de Ferrovial, FCC, Acciona y Sacyr. El Ministerio de Fomento tiene previsto adjudicar el proyecto en breve, para inaugurar la línea en 2011.