Redaccion | Lunes 20 de octubre de 2014
La petrolera que preside Antonio Brufau pretende vender el rascacielos que está construyendo en la ampliación de la Castellana para llevar sus oficinas a un nuevo parque empresarial horizontal cerca de la estación de Atocha.
La torre que diseñó Norman Foster como futura sede de Repsol YPF se ha quedado sin inquilino antes incluso de tenerlo. La petrolera no llevará a sus casi 4.000 empleados de la región al rascacielos, sino que los agrupará en un nuevo parque empresarial diseñado por Rafael de la Hoz.
La decisión no costará nada a la empresa, ya que prevé invertir 450 millones de euros en el campus, cerca de 300 millones menos por los que pretende vender la torre, que se está construyendo en la antigua ciudad deportiva del Real Madrid.
El campus empresarial de Repsol YPF se instalará en una parcela de 32.000 metros cuadrados, situada en la zona de Méndez Álvaro, que la petrolera ha comprado a la Compañía Logística de Hidrocarburos (CLH), y se prevé que las obras estén terminadas en 2009.
El complejo, que constará de varios edificios, tendrá capacidad para unas 4.000 personas y dispondrá de unas 2.000 plazas de aparcamiento, el doble de las previstas en el rascacielos. Según la petrolera, la agrupación de sus profesionales en un solo centro generará importantes sinergias.
La dimensión del campus permitirá agrupar en un espacio común a todos los empleados de Repsol, que ocupan ahora doce edificios distintos en Madrid.
La empresa ha abierto un buzón de sugerencias para conocer las preferencias de la plantilla.
El complejo, que ocupará una superficie equivalente a cinco campos de fútbol, contará con restaurantes, gimnasio, guardería, zonas ajardinadas y áreas de ocio.