Josep Ferrer | Lunes 20 de octubre de 2014
Los pisos de segunda mano en el distrito barcelonés de Gracia se han encarecido de forma significativa. Esta zona ha pasado de tener un precio medio de 4.684 euros por metro cuadrado en el primer trimestre de 2006 a superar los cinco mil euros, según un estudio de la red inmobiliaria Comprarcasa.
Según este mismo estudio el precio medio de compra de un piso de segunda mano en la ciudad de Barcelona se sitúa en los 4.996 euros por metro cuadrado, un 13% más que a finales de 2005. Los precios más elevados son los de la zona alta de la capital. Detrás está la izquierda del Eixample donde los pisos usados han subido un 3% en el último trimestre del año, seguida de cerca por les Corts, la derecha del Eixample y Ciutat Vella. En contraposición, Nou Barris es donde se pueden adquirir los pisos de segunda mano más baratos. El precio medio se sitúa en los 3.325 euros por metro cuadrado, cerca de la mitad de lo que cuesta en la zona alta.
A pesar de todo Nou Barris es el distrito donde los precios de la vivienda usada han aumentado más, un 4% durante el último trimestre del año. En este mismo período, los precios han bajado en Horta-Guinardó (un 1%), donde los pisos valen 4.437 euros y en Sant Andreu (un 3%), donde el precio medio de las viviendas usadas es de 4.493 euros el metro cuadrado.
El precio de la vivienda ha experimentado un incremento a lo largo del año en todos los distritos de la ciudad de Barcelona. Curiosamente, las subidas más insignificantes se han dado en Gracia (8%) y Nou Barris (6%) que se sitúan por primera vez por debajo de los dos dígitos.
El estudio también ha detectado una desaceleración del mercado inmobiliario. Según el presidente de la Asamblea de Comprarcasa Barcelona, Xavier Garrigós, el aumento del precio de los pisos es cada vez menor y la dificultad de vender una vivienda de segunda mano aumenta. “El plazo para vender un piso no tendría que superar los tres meses. Las demoras y la negociación a la baja se producen porque hay desajustes con el precio real”, afirma Garrigós.
Según una encuesta de la red de franquicias, ha aumentado la demanda de pisos pequeños por parte de personas separadas o divorciadas. Un 85% de los compradores son hombres solos que quieren un piso de alquiler de dos habitaciones.