Redaccion | Lunes 20 de octubre de 2014
14/06/2006.- La presentación del informe anual de Grupo i sobre vivienda vacacional en España deja la impresión de que se puede ser optimista con respecto a las posibilidades de crecimiento. La normalización, que ha afectado a todo el residencial, también ha llegado a este mercado, ralentizando las ventas, pero, en general, los promotores mantienen el optimismo.
España sigue teniendo una posición de privilegio en el mercado de la vivienda vacacional. Esta es la conclusión a la que podría llegarse tras estudiar los datos ofrecidos por Grupo i en la presentación de su estudio anual sobre este sector, que supone un 26% del total del mercado residencial español. Un peso específico dentro del inmobiliario, que lleva a Raúl García, director de operaciones de la consultora, a decir que hay que ocuparse de él y no descuidarlo. Para García, la construcción de vivienda vacacional “es un elemento muy importante del mantenimiento del sector inmobiliario en España” y, por tanto, un factor también de peso en la economía española, para la que este sector aporta un 10% del PIB anualmente.
Según los datos aportados por Grupo i, los 136 principales municipios costeros de nuestro país cuentan con un parque de 1,2 millones de viviendas. Las localidades de más de 10.000 habitantes, inician unas 100.000 viviendas anuales y se terminan unas 80.000 viviendas en total al año.
El informe, también confirma la ralentización de los ritmos de venta en alrededor de tres meses respecto al año 2005, pero, según encuestas realizadas a los promotores, la opinión de estos es que la evolución será positiva durante los próximos cuatro meses.
Los incrementos de precio en 2005 se sitúan en un 11,9%. Para la consultora, el crecimiento en 2006 estará en torno al 9% y en una orquilla entre el 6,9% y el 12,9%. La mayor parte de los promotores (un 35%) piensan que los precios crecerán del 7% al 9% en 2006 y según el 43% de ellos, este crecimiento será del 4% al 6% en 2007, de manera que la opinión general augura crecimientos algo más moderados que los de los últimos años.
Dentro de la importancia que tiene la industria de la vivienda vacacional en el sector residencial, el director de operaciones de Grupo i destaca que se trata de una parcela importante, ya que “puede ayudar a compensar los ciclos del mercado de primera vivienda, ya que su evolución no es la misma”. Esto se debe a que no es exclusivamente dependiente de la demanda nacional, sino que, en un 38,3%, el comprador es extranjero. La inversión de los extranjeros en este producto bajó durante 2005 según los datos aportados por el Banco de España, pero ha empezado 2006 con una subida del 5%, lo que augura mejores tiempos en este sentido. Dentro de la demanda extranjera destacan el Reino Unido (30% en 2005) y Alemania (27% en 2005), pero se espera un importante crecimiento de otros, como Noruega o Suecia, así como un peso creciente de compradores irlandeses. En cuanto a los destinos, entre los demandantes nacionales domina Costa del Sol y Costa Blanca, aunque ha habido un gran crecimiento de Baleares, según las encuestas realizadas a los promotores durante abril de 2006. Los inversores extranjeros se decantan principalmente por Costa Blanca, Costa del Sol y Costa de la Luz.
En general, las perspectivas son positivas, ya que el turismo sigue creciendo año tras año, pese a la competencia de nuevos destinos, especialmente los países del Adriático y Turquía, que, no obstante, no ofrecen tanta seguridad a la hora de invertir en vivienda, aunque sí atraigan a gran número de visitantes temporales.