El futuro complejo, que incluye un centro de I+D+i, un hotel, viviendas y torres de oficinas, será uno de los más vanguardistas del mundo y se podría convertir en un nuevo icono arquitectónico para la capital
Carlos Moraga | Lunes 20 de octubre de 2014
05/09/2006.- El macro proyecto para la construcción de un gran complejo del motor en Pinto, pasó un trámite más el mes de julio y se dirige de forma imparable a su futura materialización.
El Ayuntamiento de esta localidad aprobó el texto refundido del Plan General de Ordenación Urbana, que incluía el pormenorizado del Espacio del Motor. El consistorio tuvo que resolver 53 alegaciones referidas al proyecto, que requirieron de ocho contestaciones. El siguiente paso es enviar a la Comunidad de Madrid la propuesta urbanística, esperando que el Gobierno de Esperanza Aguirre ratifique la aprobación, como ya ha anunciado.
El Espacio del Motor es un ambicioso proyecto que pretende situar a Madrid en el circuito de las principales competiciones deportivas de automovilismo y motociclismo, especialmente en el de la Fórmula 1. Con ese objetivo, uno de sus primeros pasos fue conseguir la homologación del circuito por parte de la Federación Internacional de Automovilismo (FIA), en el año 2004. Pero nace, también, con vocación de convertirse en un icono arquitectónico de la ciudad, una de esas construcciones por las que se identifica a una urbe. Esa es, al menos, la intención de Salvador Pérez Arroyo, cuyo estudio de arquitectura se ha encargado de diseñar el proyecto.
Además del circuito, el complejo contará con varias edificaciones singulares. A la entrada del recinto se construirán unas torres de oficinas, compuestas por módulos circulares sostenidos por columnas. Esta pieza arquitectónica recuerda, curiosamente, a otra obra del autor: el Faro de Madrid, ubicado en la plaza de Moncloa, a la entrada de la capital por la A-6 y construido en 1992. El complejo, además de las instalaciones deportivas, albergará también la llamada zona I+D+i, donde se pretende ubicar un centro tecnológico de investigación y desarrollo orientado al mundo del automóvil. Los edificios en esta zona tendrán un diseño en forma de cono seccionado, de manera que algunos tendrán como base la parte circular de mayor superficie y otros la de menor, alternándose unos y otros. También se pretende crear una zona residencial, que permitirá financiar parte del proyecto y estará protegida de la contaminación acústica gracias a una ladera artificial.
Por último, el diseño estrella será el que se situará en la zona de las gradas, atravesando todo el espacio central del complejo. El singular edificio, bautizado como La Bandera por la forma de su cubierta, acogerá una amplia oferta de actividades, tales como exposiciones, museos, hoteles, cines, restaurantes o comercio, con la intención de convertirse en el más representativo de todo el complejo. Desde su parte más elevada se podrá tener control visual sobre todo el trazado del circuito.
Tras la emisión del preceptivo informe de la Consejería de Medio Ambiente, como paso previo a la aprobación por parte del Ayuntamiento de Pinto, y su posterior envío a la Comunidad de Madrid para la aprobación definitiva, los promotores del complejo (la sociedad Motordraft, creada a tal efecto), calculan que podría estar operativo en un plazo de cuatro años. El proyecto, cuyo coste ascenderá a unos 120 millones de euros, se financiará exclusivamente a través de promotores privados, sin necesidad de contar con inversión pública alguna. Las instalaciones ocuparán una superficie total de 4.782.746 metros cuadrados y contará con 36.204 aparcamientos, ampliables los días de competición, por medio de la liberación de los espacios ocupados por los circuitos de tierra anexos.