Redaccion | Lunes 20 de octubre de 2014
El arquitecto británico ha avanzado los detalles de su proyecto para urbanizar el espacio liberado en Valladolid, una vez que sean soterradas las vías del tren de alta velocidad.
La propuesta tiene que ser aprobada por la sociedad Valladolid Alta Velocidad 2003, compuesta por el Ayuntamiento, la Junta de Castilla y León y el Gobierno central. El proyecto contempla la creación de siete nuevos barrios, que tendrán un total de cinco mil viviendas. Un bulevar de cuatro kilómetros de largo y 60 metros de ancho, albergará cuatro torres de treinta pisos de altura en lugares estratégicos, en los que se produce la unión entre los dos ejes que existen actualmente. Con este proyecto, el arquitecto británico busca la integración de las zonas en que se divide la ciudad.
Para dotar de sostenibilidad el núcleo de la ciudad, Rogers ha diseñado un plan basado en tres estrategias: el transporte, los espacios abiertos y el desarrollo. Una de las piezas centrales del proyecto será un intercambiador de transportes que se contruiría frente a la estación de Campo Grande. Además se extenderá el principal eje peatonal de la ciudad, que actualmente conecta la estación con la Plaza Mayor, hasta el barrio de Delicias, ahora aislado por las vías y talleres.
Esta propuesta supondría una inversión cercana a los 900 millones de euros, y se prolongaría en el tiempo durante quince años.