LOS TIPOS SUBEN PARA TODOS
Redaccion | Lunes 20 de octubre de 2014
La última reunión del Banco Central Europeo (BCE), que esta vez y de forma extraordinaria tuvo lugar en Madrid, se saldó con un incremento del precio oficial del dinero de un cuarto de punto, hasta situarlo en el 2,75%. La medida adoptada por Jean Claude Trichet y los suyos tiene repercusiones evidentes para el bolsillo de los ahorradores, más aún en España, donde el 80% de la población tiene una vivienda en propiedad. La mayor parte de los propietarios, aquellos cuyas economías domésticas soporten el peso de una hipóteca, verán como las cuotas mensuales se encarecen irremediablemente.
El argumento esgrimido por los economistas de la institución europea fue el de contener el aumento de la inflación, cosa que parece muy loable, pero que además tiene otras consecuencias. Las grandes empresas también padecerán el endurecimiento de la política monetaria europea, especialmente aquellas que cuenten con unos niveles de endeudamiento más abultados.
Entre este colectivo se encuentran las grandes constructoras españolas, que hasta ahora se habían aprovechado de la situación favorable de los tipos de interés, en mínimos históricos, para involucrarse en un proceso de compras y crecimiento corporativo, estimuladas por el exceso de liquidez. FCC, ACS, Ferrovial y Sacyr Vallehermoso no han dudado en tomar participaciones importantes en otras compañías de su propio sector o de otros con la finalidad de conseguir valor añadido para sus accionistas. Ya de paso, han conseguido diversificar su actividad y tomar posiciones de referencia en otras líneas de negocio que hasta ahora no eran representativas en sus cuentas anuales.
Otra de las virtudes de esta estrategia es que les ha permitido blindarse de cara a posibles opas hostiles, ya que no podemos olvidar que estas compañías están presididas por accionistas minoritarios, cuya posición podría quedar en entredicho en caso de que se presente uno de esos gigantes que últimamente andan por el mercado deseando invertir su dinero. Pero la estrategia de acudir a la deuda, en vez de hacer ampliaciones de capital podría tener los días contados, dado el nuevo escenario que se avecina en lo que a los tipos de interés se refiere.