Gestión de aeropuertos y servicios en tierra son objetivos prioritarios en los planes de diversificación.
Redaccion | Lunes 20 de octubre de 2014
La privatización de los servicios aeroportuarios ha despertado el interés de las principales firmas constructoras del país, que no quieren quedarse sin su porción del pastel. Florentino Pérez, Villar Mir, Entrecanales, Del Rivero, Koplowitz y Del Pino miran al cielo, para quedarse con el negocio de tierra.
En los últimos años, los principales grupos constructores y de servicios han ampliado su presencia en el negocio aeroportuario, en una estrategia que va mucho más allá de la actividad tradicional de la gestión de servicios e infraestructuras aeroportuarias o handling. La presencia de las grandes firmas constructoras en este segmento de negocio es todavía estrecha, pero tienen un futuro prometedor.
El auge de las compañías de bajo coste, que operan desde aeropuertos alternativos a los grandes núcleos aeroportuarios anima a este sector que incluso ha despertado el interés de la iniciativa privada. En España, son promotores privados los que están detrás de aeropuertos como Quixote, en Ciudad Real, o el que está previsto en la ciudad de Castellón, una tendencia que se desarrolla de forma simultánea en todo el mundo. La tendencia hacia la privatización lleva incluso a algunos aeropuertos a licitar la concesión de cada una de sus pistas de aterrizaje y despegue de forma individualizada.
En el caso concreto del handling, las previsiones realizadas por la consultora DBK para este sector en España indican que este año se generará un volumen de negocio cercano a los 1.250 millones de euros, lo que supone un incremento de apenas el 5% respecto a la facturación global contabilizada en el ejercicio 2005 cuando se registró, un volumen de 1.190 millones de euros, a falta de los datos definitivos. El informe de DBK hace hincapié en la “elevada competencia” que acusa el sector, y que obliga a las empresas responsables de los servicios de asistencia en tierra a pasajeros y aviones a bajar los precios para resultar más competitivas que sus más directos rivales.
Natalia Aguirre, del departamento de análisis de Renta 4, asegura que “el negocio del handling es muy estrecho y no se espera un cambio radical de escenario en los próximos años. Más bien, me atrevería a decir que, en términos de facturación, los márgenes serán cada vez menores porque el crecimiento del tráfico de pasajeros lo aportarán las compañías de bajo coste, que prescinden o limitan al máximo todos los servicios aeroportuarios precisamente para tener los menores costes posibles y poder ofrecer así los precios más bajos”.
Por su parte, Jesús Centeno, de Gaesco Bolsa, opina que “ahora, el punto de interés es la liberalización de los servicios de asistencia en tierra que está llevando a cabo AENA. Esto supondrá una puerta de entrada para los grupos constructores que ahora no están en esta actividad y permitirá abrir un sector que todavía está muy controlado por las propias compañías aéreas, a través de sus filiales de handling. No obstante, el negocio es pequeño. El verdadero negocio es la gestión de aeropuertos internacionales. Es a eso a lo que tienen que aspirar las grandes grupos, igual que están aspirando y haciéndose con la gestión de grandes autopistas en todo el mundo”.
En España, el sector del handling está liderado por Iberia y Air Europa, un dominio que se explica porque la actividad generada por el transporte regular de pasajeros continúa acaparando el 77% del volumen de negocio. Los principales grupos constructores presentes en este negocio son FCC y Acciona, a través de sus respectivas filiales, Eurohandling e Ineuropa.
Caminos de hierro y aire.- La apuesta de los principales grupos es la gestión de aeropuertos, al paso del proceso mundial de liberalización que se está produciendo y que está abriendo una oportunidad de negocio similar a la de las concesiones de autopistas. En este sentido, Ferrovial –nacida, curiosamente, para hacer caminos de hierro: las vías del ferrocarril- se está posicionando como el grupo más activo.
Entró en este mercado hace cinco años y ya es uno de los principales promotores privados de aeropuertos, tanto por activos gestionados como por inversiones comprometidas. En la actualidad, gestiona cuatro aeropuertos en tres países por los que transitan 35 millones de pasajeros al año. Gestiona los aeropuertos de Sydney (en Australia), los de Bristol y Besfast (en el Reino Unido) y otro más en Chile. Su apuesta por el negocio de la gestión aeroportuaria ha hecho que, dentro de su actividad concesionaria, los aeropuertos acaparen ya el 12% de la inversión, muy lejos todavía del 78% que representan las concesiones de autopistas, pero por encima de lo que invierte el grupo en el negocio de aparcamientos, tradicionalmente la segunda actividad concesionaria de Ferrovial a través de su filial Cintra.
Un ejemplo más del interés de Ferrovial por el negocio aeroportuario es la reciente operación de compra llevada a cabo sobre Swissport, uno de los principales operadores de handling del mundo, con presencia en 40 países y 170 aeropuertos, principalmente en Europa y Estados Unidos. Este operador, con más de medio siglo de experiencia en el sector y líder mundial en la gestión independiente (no asociada a aeropuertos o compañías aéreas), facturó el año pasado más de 800 millones de euros, y registró un Ebitda de 66 millones.
Sacyr y OHL en la pista de despegue
AENA, el ente público que gestiona los aeropuertos españoles, está en proceso de externalización. Ese proceso comenzó el año pasado, con la concesión de la gestión del handling de pasajeros y carga de los pequeños aeródromos. Pero la liberalización es paulatina y el paso más esperado se dará este año, porque será cuando se externalicen los servicios de los principales aeropuertos.
Los grandes grupos constructores ya han anunciado que acudirán a los concursos que convoque AENA. Y por ello, Sacyr Vallehermoso acaba de situarse en la pista de despegue de esta línea de negocio, de la que hasta ahora estaba ausente. A través de su filial de servicios Valoriza, llegó hace un año a un acuerdo con la compañía británica Serviciar/GlobeGround para crear una empresa conjunta de servicios de handling.
La nueva sociedad, constituida al 50%, participará en el proceso de concesión de licencias de AENA, pero también extenderá su actividad a otros países donde ya opera Servisair. La compañía británica –que, no obstante, pertenece al grupo francés Peanuille Polyservices- es uno de los líderes mundiales del sector: opera en 150 aeropuertos de 31 países y da servicio a 86 millones de pasajeros y 1,4 millones de aviones al año en todo el mundo.
La participación de OHL en el negocio aeroportuario se limita a la actividad que desarrolla la inmobiliaria mexicana Fumisa, en la que el grupo de Villar Mir tiene una participación del 50% a través de OHL Concesiones. En todo caso, sus planes de futuro también pasan por el negocio de los servicios aeroportuarios y ya ha anunciado que contempla la posibilidad de entrar en el negocio del handling a partir, precisamente, de la experiencia adquirida en el sector a través del aeropuerto gestionado por su participada en México.
FCC vuela en tierra
FCC concentra su actividad de servicios aeroportuarios en su filial Flightcare, integrada en la rama de servicios del grupo, FCC Versia. En sus poco más de tres años de vida, Flightcare se ha convertido en uno de los principales operadores europeos de handling, tanto de carga como de pasajeros, con una importante presencia en Europa. Presta servicio a más de 120 compañías aéreas de todo el mundo que transportan anualmente cerca de 38 millones de pasajeros y operan más de 175.000 vuelos. En carga, Flightcare mueve al año más de 200.000 toneladas.
En España, gestiona concesiones de gestión de pasajeros en los aeropuertos de Madrid-Barajas, El Prat (Barcelona), Bilbao, Valencia, Sevilla, Málaga, Santiago y Canarias. Además es responsable de la gestión de carga de Barajas y El Prat. Su presencia no se reduce a la decena de aeropuertos nacionales, sino que es más destacada en Bélgica, donde Flightcare es líder en el mercado. Gestiona el handling de pasajeros, rampa y carga de los aeropuertos de Bruselas y Ostende-Brujas, por los que pasan 16 millones de pasajeros al año.
Según la memoria anual de FCC, la aportación de Fligthcare al negocio del grupo alcanzó los 8.651 millones de euros.
Acciona, los pioneros
El grupo que controla la familia Entrecanales fue de los primeros en vislumbrar el potencial de este negocio. En 1994, fueron pioneros en incorporar los servicios aeroportuarios a sus líneas de actividad, a través de la filial Ineuropa Handling. Hoy, toda esta actividad se engloba en Acciona Airport Services, en la que se integra también la gestión de aeropuertos en otros países europeos.
Acciona Aiport Services ganó la concesión para la prestación de servicios de asistencia en tierra en los aeropuertos alemanes de Fráncfort, Berlín y Hamburgo. Sólo la ciudad aeroportuaria de Francfort, núcleo de enlace hacia el Este, registra un tráfico anual que supera los 50 millones de pasajeros. Este año se pondrá en marcha una nueva pista que permitirá responder a la demanda prevista para los próximos 20 años.
En 2004, últimos datos que incluye la memoria del grupo, la filial de servicios aeroportuarios de Acciona atendió más de 150.000 vuelos, con una cifra de negocio de 808,7 millones de euros, lo que representa un crecimiento del 21,3% y un beneficio antes de impuestos al borde de los 60 millones, un 12,4% más que en 2003.
ACS, por partida doble
Los escarceos de ACS en el negocio de la gestión de aeropuertos son tímidos, por ahora. El grupo que lidera Florentino Pérez es protagonista de algunas incursiones. Por ejemplo, participa en empresas concesionarias junto a FCC, AENA y empresas locales, con las que comparte la gestión de aeropuertos como el de Santiago de Chile (de cuya concesionaria controla el 14,8%), Cali, en Colombia (con el 33,3%, junto a AENA y un socio local); Montego Bay, en Jamaica (35%) y Aeropuertos Mexicanos del Pacífico, de cuya empresa de explotación controla el 28,2%.
Sin embargo, de forma indirecta, la presencia de ACS en el negocio de la gestión aeroportuaria avanza a paso acelerado. Abertis (la concesionaria en la que prácticamente controla el 25%) constituyó el año pasado la sociedad Abertis Airports, a su vez, titular de las compañías de gestión de infraestructuras aeroportuarias ACDL y Codad. A través de ACDL (90% Abertis, 10% AENA) gestiona la operadora británica de aeropuertos TBI, presente en ocho plazas internacionales, entre ellos, el de Luton (Londres), el de Skavsta (Estocolmo) y el de Orlando, en Florida (EE UU). A través de Codad, gestiona el aeropuerto de Eldorado (Bogotá).