AUTONOMÍAS

Sampol se adjudica la desaladora que se construirá en Alicante

La firma mallorquina se posiciona en el negocio de la desalación

Redaccion | Lunes 20 de octubre de 2014
La empresa se ha adjudicado la construcción de la nueva desaladora del Canal de Alicante, que producirá 65.000 metros cúbicos al día y cuyo importe de licitación asciende a 68 millones de euros. Sampol, una empresa con 72 años de historia y capital balear, comenzó construyendo aeropuertos y hoteles.

El Ministerio de Medio Ambiente ha adjudicado esta obra a la Unión Temporal de Empresas (UTE) formada por OHL, Inima, Construcciones Alpi y Sampol Ingeniería y Obras, con lo que este proyecto permite a la empresa mallorquina "entrar en el negocio de la desalación y diversificar aún más los proyectos que es capaz de gestionar", según han informado.


La ubicación elegida para su construcción se encuentra en el tramo costero comprendido entre Agua Amarga y playa de El Altet, próximo a la Instalación Desaladora de Agua Marina del Canal de Alicante y en una zona accesible a los depósitos de Rabasa, que se ampliarán en cien mil metros cúbicos con esta misma actuación. Para producir la cantidad mencionada de agua desalada serán necesarias siete líneas de producción de 9.286 metros cúbicos de agua al día cada una. La tecnología de desalación utilizada por esta planta será la ósmosis inversa, con líneas de tratamiento dispuestas en una etapa y un paso, y presentará un diseño que minimizará el consumo energético.

Vanguardia tecnológica.- Esta planta desaladora, cuyo presupuesto de obra comprende además su explotación durante un periodo de tres años, incorpora además las últimas tecnologías, quedando completamente automatizado el control de operación y parada por emergencia.

El proyecto objeto de adjudicación incluye la obra para captación y bombeo de agua, la construcción de la planta desaladora, la acometida eléctrica, la ampliación de los depósitos de Rabasa y las medidas correctoras para el mantenimiento y mejora del Saladar de Agua Amarga. Está prevista, además, la instalación de una planta fotovoltaica de más de 800 kilowatios para producir energía eléctrica renovable, que equilibrará el impacto medioambiental derivado del elevado consumo energético que tendrá esta importante infraestructura.

Esta obra se enmarca dentro de la estrategia del actual Gobierno de apostar con fuerza por la desalación como método para abastecer de agua a España. El Plan Agua suma más de 25 desaladoras, muchas de las cuales se ubican en la zona del Levante donde los recursos hídricos son escasos.