Josep Ferrer | Lunes 20 de octubre de 2014
A principios de 2008, cerca de 300.000 personas que viven en una decena de municipios del Baix Llobregat se beneficiarán del hospital que se va a levantar en Sant Joan Despí. En el proyecto, que se construirá por el sistema mixto, con capital público y privado, se invertirán 54,50 millones de euros.
Han sido necesarios 25 años de reivindicaciones y de recoger miles de firmas para que el hospital comarcal del Baix Llobregat pueda ser una realidad. El nuevo centro sanitario ocupará un solar de más de 53.000 metros cuadrados cedidos por el Ayuntamiento de Sant Joan Despí. Dispondrá de 238 camas de hospitalización, distribuidas en siete unidades de internamiento, doce camas en la unidad de vigilancia intensiva (UVI), ocho salas de operaciones, quince plazas de recuperación post-quirúrgica y una unidad de cirugía sin ingreso con 20 plazas.
En el hospital trabajarán 638 profesionales. Según la consejera de Salud, Marina Geli, el nuevo equipamiento “tendrá todo lo que tiene un hospital comarcal, y un poco más, porque hemos decidido que este territorio tan poblado, donde hay insuficiencia de camas de curas paliativas, tenga unidad de críticos”.
Financiación mixta.- La construcción de las instalaciones corre a cargo del grupo de empresas formado por Acsa Agbar Construcción, Emte, Teyco y La Caixa, la única oferta presentada a concurso, ya que el centro se financiará por la nueva modalidad de P.P.P., lo que frenó a otros grupos a presentarse al concurso, según ha reconocido la propia consejera.
Las empresas encargadas de construir el centro sanitario tendrán que financiar las obras y el equipamiento, valorados en algo más de 54,50 millones de euros (42,76 millones para obras e instalaciones y 11,75 millones para equipamientos) y también tendrán que hacerse cargo del coste de los diferentes servicios, como la luz, el agua y el gas. A cambio, podrán explotar el aparcamiento o la restauración, además de otros servicios, durante un mínimo de 30 años, periodo durante el que también recibirán un alquiler anual de Sanidad Integral del Baix Llobregat, sociedad pública que gestionará el hospital y pondrá todo el personal médico.
El proyecto del nuevo hospital es obra del equipo de arquitectos Pineda-Brullet. Destaca por su funcionalidad y respeto por el medio ambiente, ya que está prevista la instalación de placas solares para ahorrar energía, así como la creación de una gran zona verde de 1,72 hectáreas.
El hospital está perfectamente comunicado por carretera. Por carretera, se encuentra junto a la salida de Sant Joan Despí y Sant Just Desvern de la autopista B-23. Además, el Trambaix tiene una parada en la zona y existen diversas líneas de autobuses urbanos y metropolitanos que atraviesan el lugar.