El resultado de explotación aumenta el 57%
Redaccion | Lunes 20 de octubre de 2014
Sacyr Vallehermoso ha cerrado el tercer trimestre con un aumento del beneficio del 0,5%, hasta 235 millones. El estancamiento se deriva de la caída en los extraordinarios. El resultado de explotación aumenta el 57%.
Los resultados extraordinarios netos del periodo, en el que se computan los ingresos de Somague y ENA, ascendieron a 33,7 millones frente a los 115,4 millones del año anterior. La caída, del 70%, deriva de la menor venta de activos, sobre todo por parte de Testa, la filial patrimonialista del grupo.
La cuenta de resultados refleja un beneficio bruto de explotación (Ebitda) de 548 millones, el 66% más que en septiembre de 2003, mientras que el repunte de las amortizaciones y la mayor dotación al fondo de reversión reducen el resultado de explotación a 427 millones, el 57% más. El fuerte repunte del resultado financiero negativo (crece el 60%), deja el beneficio ordinario en 304,7 millones, cifra superior en el 63% a la del periodo de referencia de 2003.
Por su parte, la cifra de negocio se incrementó en un 29,75%, hasta los 2.516 millones, según la compañía que achaca esta 'significativa' mejora de las cuentas a la integración de Somague y ENA y a la buena marcha de Sacyr y Vallehermoso.
Por lo que se refiere a la actividad de construcción (llevada a cabo por Sacyr-Somague), la compañía detalla que la facturación alcanzó los 1.471 millones, con un beneficio neto de 50,8 millones, un 12,6% más.
Respecto a la promoción de viviendas (llevada a cabo por Vallehermoso), el beneficio neto alcanzó los 82,8 millones, un 25,8% más que hasta septiembre del año pasado, y la facturación llegó a los 736,5 millones, un 16,1% más.
En los nueve primeros meses del año, Vallehermoso cerró contratos para 2.669 viviendas, un 3,1% más, por un importe de 658,1 millones, lo que supone un incremento del 12%.
La actividad de concesiones de infraestructuras ingresó un 170,1% más, hasta los 241,5 millones, aunque ganó un 67% menos, hasta los 7,3 millones, debido -según la compañía- a la carga financiera derivada de la compra de ENA y al impacto del tipo de cambio, entre otros motivos.
Respecto a la actividad de patrimonio inmobiliario, la caída de las ventas de activos hizo que el resultado neto disminuyera un 34,3% hasta 93,5 millones. Sin embargo, la cifra de negocios, procedente de contratos de alquiler, se incrementó en un 5,1%. El área de servicios facturó 54,2 millones, el 62,1% más, al tiempo que el resultado neto arroja pérdidas de 0,6 millones.
Durante la reunión del consejo de ayer se aprobó el nombramiento del hasta ahora consejero delegado, Luis del Rivero, como presidente del consejo y de su comisión ejecutiva; así como a Manuel Manrique como sustituto del primero.
El consejo también aceptó la dimisión presentada por el consejero Antonio Basagoiti, en representación del SCH. Además, han presentado su dimisión los consejeros Pedro Gamero, presidente de Testa que continúa en su puesto, y Francisco Javier Gayo, quien será nombrado presidente de Sacyr.