AUTONOMÍAS

El futuro barrio de Delicias tendrá un túnel de salida bajo el paseo de la A-68

Medirá 1,3 kilómetros de longitud y conectará El Portillo con la intermodal

Redaccion | Lunes 20 de octubre de 2014
El futuro túnel de salida que se construirá bajo el paseo de la autopista A-68 permitirá que el tráfico de Zaragoza se descongestione sustancialmente. Según el avance de diseño del barrio de la estación del AVE, que plantea revolucionar por completo la circulación del sector, la avenida de Navarra y la A-68 pasarán a ser viales de sentido único para la entrada y la salida de la ciudad, respectivamente.

El paso inferior, de 1,3 kilómetros de longitud, contará con cuatro carriles para garantizar una salida rápida de la capital. La previsión es que los vehículos inicien la travesía subterránea en El Portillo, en la zona próxima a la glorieta de la avenida Madrid, y salgan al exterior en la intermodal, tras superar la rotonda de prolongación de la calle Rioja.

A esta altura, los vehículos saldrán a la superficie y pasarán bajo el paseo de la A-68, que discurrirá en este sector por un voladizo paralelo al mirador del río Ebro. Ambos viales se unirán medio kilómetro más adelante.

Con la finalidad de reducir los costes en la ejecución de los trabajos, los redactores del avance del proyecto, la consultora Idom y los arquitectos Manuel Castillo y Julio Clúa, han optado por aprovechar el cerramiento ferroviario para la estructura viaria, ya que ambos túneles discurrirán en paralelo.

La idea de construir un túnel para el acceso a la capital aragonesa no es nueva, aunque nunca ha formado parte de la planificación oficial de la ciudad. La Confederación de Empresarios de Zaragoza ya planteó en 1998 soterrar la A-68 para mantener una entrada y salida rápida a la ciudad, ya que mantener la autopista por la superficie habría supuesto una barrera entre Delicias y La Almozara.

El Consistorio y la Diputación General de Aragón llegaron incluso a encargar a Idom un estudio del entorno urbanístico de Delicias en el año 1999, en el que la consultora de ingeniería se decantaba por soterrar la vía rápida entre el paseo de María Agustín y Delicias, pero fue descartado debido a su elevado coste, ya que ascendía a 21 millones de euros.

El paso inferior se enmarca en la profunda reordenación viaria del entorno de la estación del AVE y será una de las actuaciones más importantes para la creación del nuevo barrio sobre los suelos ferroviarios. La actual A-68 se convertirá en un bulevar con cuatro carriles en dirección única de salida de la ciudad. El transporte público tendrá reservado un corredor paralelo.