El primer objetivo será adjudicarse la gala A-65, de 142 kilómetros de longitud
Redaccion | Lunes 20 de octubre de 2014
Abertis y ASF unirán sus fuerzas en los futuros concursos de concesiones de autopistas españoles y franceses. El acuerdo alcanzado por las dos compañías ha dado lugar al nacimiento de uno de los competidores más fuertes en este sector en ambos países. En virtud de este convenio, reforzarán también su colaboración en la ingeniería de explotación vinculada a la seguridad y a la vialidad.
Lucía Sierra.
Madrid
Abertis y la concesionaria francesa Autoroutes du Sud de la France (ASF) han firmado un acuerdo para competir de manera conjunta por los nuevos proyectos de autopistas, aparcamientos y plataformas logísticas. El convenio tiene características similares a los que la compañía española ya tiene con la portuguesa Brisa y la italiana Autostrade.
Como resultado de esta nueva colaboración, las empresas tienen planeado presentar una oferta al concurso de construcción y explotación de la autopista francesa A-65 Langon-Pau, que tendrá una longitud de 142 kilómetros.
El acuerdo alcanzado incluye también el compromiso de las dos concesionarias para desarrollar las sinergias en la explotación de las autopistas A-7 española y A-9 francesa, que ya están gestionando y que, además, están conectadas en la localidad de Le Perthus. Con esta finalidad, intensificarán el intercambio de información sobre tráfico y reforzarán su colaboración en la ingeniería de explotación vinculada a la seguridad y la vialidad.
Además, ASF y Abertis han diseñado un sistema de telepeaje o peaje dinámico que podrán utilizar los conductores de los dos países. El objetivo de ambos grupos es “optimizar la gestión de sus redes y mejorar la calidad y continuidad del servicio ofrecido a sus clientes”.
El convenio firmado con ASF no incluirá el concurso público convocado en España para adjudicar nuevas autopistas y en el que Abertis ya ha presentado ofertas junto con las empresas españolas Dragados y ACS.
En cuanto al acuerdo que Abertis mantiene con Brisa, firmado en septiembre de 2002, incluye la colaboración y participación conjunta en proyectos internacionales y supuso una inversión de 218 millones de euros por parte de la portuguesa para hacerse con el 5,7% del capital de la entonces Acesa. Tras la fusión, esta participación pasó a ser del 4% del capital de Abertis.