Entre enero y agosto se han inaugurado 25 nuevos complejos, un 79% más que en el mismo periodo de 2002
Redaccion | Lunes 20 de octubre de 2014
En vista de los datos de nuevas aperturas de centros comerciales durante los dos primeros cuatrimestres de 2003, es más que probable que este año se alcance un nuevo récord en superficie bruta alquilable inaugurada. Se trata, fundamentalmente, de grandes complejos que superan los 40.000 metros cuadrados de SBA y que ponen un especial interés en cuidar el diseño y la oferta de sus operadores. Esta tendencia continuará durante los próximos años, aunque cada vez irán ganando más terreno los parques comerciales y los centros de proximidad.
Mónica Figueres
Madrid
El gran número de aperturas de nuevos centros comerciales y de complejos que han sido rehabilitados o ampliados, ha situado a España entre las ciudades europeas con mayor densidad de superficie comercial por cada 1.000 habitantes, alcanzando una media de 209 metros cuadrados.
Durante los ocho primeros meses del año, se han inaugurado un total de 25 nuevos centros, un 79% más que en el mismo periodo de 2002, y 7 más han sido reformados, lo que supone un incremento del 75% respecto a la cifra registrada entre enero y agosto del ejercicio anterior. Esto ha dado lugar a la incorporación al mercado de 725.344 metros cuadrados de superficie bruta alquilable (SBA) nueva, según los datos reflejados en el informe que ha elaborado la consultora inmobiliaria Jones Lang LaSalle.
Las regiones en las que se ha abierto un mayor número de complejos han sido Madrid, la Comunidad Valenciana, Canarias, Andalucía y La Rioja, que han incrementado sensiblemente su densidad comercial.
Los nuevos centros se caracterizan, fundamentalmente, por su gran tamaño, destacando el número de complejos regionales de más de 40.000 metros cuadrados. Este crecimiento ha llevado a la media hasta los 25.000 metros cuadrados por centro. La mayoría están promovidos por grupos españoles, aunque existe un importante interés por parte de inversores extranjeros especializados, que están tratando de afianzar sus posiciones en el mercado de la Península Ibérica. Entre ellos, siguen teniendo un peso fundamental los fondos de inversión alemanes y holandeses, que ya llevan algunos años siendo los más activos dentro del sector. La situación económica por la que está atravesando España y las altas rentabilidades que registran los centros comerciales son la causa fundamental de este interés por parte de los inversores extranjeros.
Una de las inauguraciones más importantes a lo largo de los dos primeros cuatrimestres de 2003 ha sido la de Madrid Xanadú, en Arroyomolinos, que ha destacado tanto por su tamaño como por la novedad que supone ofrecer a los usuarios una pista de nieve cubierta en la que se puede esquiar los 365 días del año. Pero este nuevo tipo de complejos no es el único que está en auge.
La ubicación de cada centro y las características específicas de su área de influencia dan lugar al desarrollo de una rica variedad de centros que se adaptan a las necesidades de su público potencial. Los parques de medianas superficies, con operadores fuertes, y los centros de proximidad están adquiriendo una relevancia cada vez mayor.
En pequeñas ciudades, de entre 50.000 y 60.000 habitantes, donde un gran centro regional podría ser demasiado grande, se están inaugurando con éxito complejos de proximidad que se adaptan mejor a su área de influencia. Esta diversidad se ve reflejada en los datos porcentuales de centros comerciales abiertos según su tipología, que sitúa en primer lugar a los centros regionales, con un 34% de la SBA, seguidos por los centros grandes, con un 27%, los fundamentados en hipermercado, con el 14%, los pequeños (11%), los parques comerciales (9%) y los centros de ocio (4%). El tipo de centro más debilitado actualmente es el que componen los factory outlet, que sólo alcanza el 1% de SBA total.
Record de aperturas.- La situación activa de este mercado hace prever que el ejercicio 2003 cierre con 44 nuevos centros comerciales y un volumen de inversión que superará los 900 millones de euros, con lo que se alcanzaría una nueva cifra record que superaría considerablemente la registrada en el año anterior.
En cuanto a las inauguraciones previstas para los próximos años, cabe destacar que las previsiones se muestran optimistas, tanto en número de centros como en superficie, situándose, según los datos de Jones Lang LaSalle, en un total de 140 los proyectos considerados de alta viabilidad hasta el año 2007.
Los parques comerciales, que incluyen tanto productos de consumo como tiendas especializadas en medianas superficies y ofertas de ocio, son una de las apuestas más importantes para los próximos años, aunque no quedarán de lado los grandes centros comerciales, que seguirán teniendo un papel fundamental. La consolidación de los parques comerciales como uno de los formatos con mayor éxito se debe principalmente a su facilidad de gestión, menores costes y capacidad de atracción para los operadores. De hecho, en muchos casos, la apertura de una de estas superficies acaba propiciando la construcción de algún centro comercial en sus inmediaciones.
Cada vez se hace más evidente la diferencia que hay entre unas regiones y otras. La moratoria que rige la concesión de segundas licencias continúa frenando el desarrollo de centros comerciales en algunas zonas que, paradójicamente, tienen un gran potencial de público y una alta capacidad de consumo, como ocurre en Cataluña. Por otro lado, hay áreas en las que se registra cierta saturación de superficie comercial, pero esta situación, según señala Javier Alcalde, director del departamento de Estudios de Mercado de Aguirre Newman, no tiene por qué ser un problema, “siempre que se adapten al entorno y la capacidad de consumo y demanda se adecue a la oferta del complejo”.
Así, frente a la alta densidad de superficie bruta alquilable registrada en provincias como Madrid, donde ésta se sitúa en más de 350 metros cuadrados por cada 1.000 habitantes, otras regiones con un alto grado de consumidores potenciales, como Girona, Lleida, Toledo, Granada, Tarragona, Ourense y Murcia, entre otras, no alcanzan los 100 metros cuadrados por cada 1.000 habitantes, una cifra por debajo de la mitad de la media nacional.