AUTONOMÍAS

Las peticiones de licencias de obra para Villa de Prado colapsan el Consistorio

El servicio de Urbanismo no tiene capacidad para atenderlas todas

Redaccion | Lunes 20 de octubre de 2014
La acumulación de peticiones de licencia de obra para la construcción de más de 2.000 viviendas en las 43 promociones que se han puesto ya en marcha en Villa del Prado ha traído como consecuencia el colapso en el servicio de Urbanismo del Ayuntamiento de Valladolid.

La tramitación de estos expedientes exige un procedimiento que comienza con la cédula urbanística.
El Servicio de Control de la Legalidad Urbanística, encargado, dentro del Departamento de Urbanismo, de la clasificación de licencias de construcción, no dispone de la suficiente capacidad como para poder cumplir con su función en estas circunstancias, por lo que no podrá terminar todos los expedientes que tiene pendientes antes de que finalice el presente ejercicio.
El concejal de Urbanismo, José Antonio García de Coca, ha señalado que, mientras esperan a que se resuelva el obstáculo que supone la elaboración de la cédula urbanística, “lo que hemos hecho es poner a más funcionarios a que elaboren las cédulas que nos solicitan, de forma que se ha conseguido una cierta agilidad”. Sin embargo, el resto de los informes redactados por los técnicos exige la firma de funcionarios públicos, por lo que no pueden recurrir a la contratación temporal de plantilla, ni siquiera en momentos de mucha actividad.
Hasta el momento, la única empresa que ha superado todas las fases es Necso, que ya cuenta con autorización para comenzar las obras en la zona desde principios del mes de septiembre. Las 42 parcelas restantes, sobre las que se levantarán más de 2.000 viviendas, aún esperan la decisión que en todos los casos adopta la Comisión de Gobierno del Ayuntamiento que preside el alcalde Javier León de la Riva.
Por su parte, García de Coca ha dado algunas razones para explicar la lentitud con que podrán salir adelante las licencias. En primer lugar, ha señalado el cambio de nombres en la Concejalía de Urbanismo tras las elecciones, cuando fue reemplazado Federico Sumillera. Además, con la llegada del nuevo equipo de gobierno, a principios de julio, se nombró un nuevo jefe del Servicio de Control de la Legalidad Urbanística, Ricardo Núñez, que ha comenzado sus nuevas funciones en este puesto recientemente.
Cuando finalice esta avalancha de peticiones, es probable que llegue una segunda oleada, pues está previsto recibir entre 300 y 400 para otras parcelas que se adjudicarán en la ampliación del polígono de San Cristóbal.