La nueva EDAR de Comillas, en Cantabria tendrá una capacidad máxima de depuración equivalente a 30.000 habitantes, y la nitrificación y desnitrificación simultánea se realizará mediante el proceso Biostyr, que permite la depuración de las aguas residuales mediante la biofiltración de flujo ascendente aireada.
Las innovadoras y avanzadas características de operación de este sistema han resuelto todas las dificultades que el proyecto planteaba desde su concepción. La construcción de la planta se realizará en un lugar subterráneo, con reducido espacio de implantación. Además, la instalación minimiza la emisión de ruidos, olores y aerosoles, y permite su integración paisajística.