Una de las claves estratégicas es actuar sobre producto más pequeño
Redaccion | Lunes 20 de octubre de 2014
08/06/2010.- Renta Corporación prevé cerrar 2010 en números positivos, frente a la pérdida de 54,5 millones contabilizada en 2009, incluyendo el cierre de operaciones corporativas que impliquen poco apalancamiento si surge la oportunidad, según anunciaron los directivos de la inmobiliaria en su junta anual de accionistas. El presidente de la compañía, Luis Hernández, adelantó que "espero y deseo poder explicar resultados positivos en la próxima junta".
Luis Hernández de Cabanyes, durante el transcurso de la Junta General de Accionistas celebrada hoy en Barcelona, aseguró que, tras un fuerte proceso de saneamiento, Renta Corporación está preparada para afrontar la situación actual generando actividad y margen, si bien con operaciones más pequeñas, con mayores dificultades a la hora de cerrar el ciclo y con márgenes más discretos. Así lo confirman las 27 operaciones de cartera nueva captadas en 2009 y las 14 operaciones que se han iniciado en el actual ejercicio. Las claves estratégicas en las nuevas operaciones han sido el actuar sobre producto más pequeño, básicamente residencial y limitando el riesgo financiero y de mercado al máximo.
Hernández de Cabanyes ha resumido ante los accionistas las medidas que fueron adoptadas en su momento. De entre ellas ha destacado la reducción de la deuda y generación de caja por venta de activos, la refinanciación de la deuda, el saneamiento del balance y la reducción de costes. Todo ello es lo que ha permitido a la compañía disponer de una situación de estabilidad para afrontar el actual periodo. El presidente de la compañía resaltó que “debemos reconocer que la prudencia adoptada en todo momento, ha evitado estar inmersos en determinadas operaciones corporativas”, que sin duda hubieran dificultado el futuro del grupo inmobiliario.
Renta Corporación dará continuidad –a corto plazo y mientras no haya cambio de señales en el mercado- al plan estratégico adoptado en el 2009, centrándose en gestionar la cartera vieja para generar caja, reducir paulatinamente deuda, seguir con la estricta política en el control de costes y generar margen nuevo con operaciones nuevas, aprovechando cualquier oportunidad que surja en el mercado inmobiliario que permita generar margen, más allá del modelo de negocio tradicional. En este sentido, el consejero delegado de Renta
Corporación, Juan Velayos, ha manifestado que la compañía seguirá “atenta a posibles cambios de tendencia en el ciclo económico para acelerar el ritmo de actividad y el volumen de operaciones de forma paulatina, a medida que la recuperación se vaya consolidando y el
mercado sea más líquido”. En su exposición a los accionistas, Velayos ha enfatizado que el “objetivo de la compañía es acceder a operaciones cada vez de mayor tamaño, tanto residenciales como de oficinas, a medida que el mercado pueda absorberlas”.
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