INMOBILIARIO

La inversión en el mercado hotelero español se reducirá un 45% este año

Ángel González | Lunes 20 de octubre de 2014
23/09/2008.- Los ajustes en los precios del suelo, el aumento del coste de las materias primas, la proliferación de nuevos destinos competidores, la caída de la demanda turística y, en especial, las restricciones crediticias provocarán un descenso en la inversión en el mercado hotelero español y en el número de futuras aperturas.

El volumen de inversión previsto para este año en el mercado hotelero español se estima en torno a los 630 millones de euros, un 45% menos respecto a lo movido en 2007, año en el que se realizaron un total de 86 transacciones por valor de 1.150 millones de euros. Así se desprende del “Informe de coyuntura y tendencias de la industria hotelera española” elaborado por la consultora Aguirre Newman.

El principal factor que está impactando en este mercado es la crisis financiera internacional, que afecta a la hora de conseguir dinero para afrontar nuevos proyectos. De hecho, se ha producido una huida de los inversores tradicionales. En los últimos años, las firmas de capital riesgo y las grandes promotoras que disponían de mucha liquidez han sido los actores principales de las operaciones. Ahora empiezan a cobrar protagonismo determinadas cadenas hoteleras apoyadas en inversores particulares, los 'family office' y los 'club deals'. La directora del Segmento de Hoteles de Aguirre Newman, Paloma Boceta, señala que “los hoteles de las principales inmobiliarias españolas están en venta, aunque no se ha llegado a la situación de que los bancos les hayan obligado a ello” y advierte de una posible entrada de “fondos oportunistas, sobre todo en aquellos inmuebles con mal funcionamiento”. Este cambio en la tipología del inversor puede ser “positivo”, afirma Boceta, ya que “el mercado se limpiará de agentes y de hoteles no adecuados ni preparados para salir de esta crisis”.

Otro factor que ha obstaculizado la inversión han sido los elevados precios del suelo, debido principalmente a la compatibilidad de su uso con suelo terciario y residencial, más rentable. En este sentido, la consultora prevé un ajuste en los precios que supondrá una oportunidad de desarrollo para inversores hoteleros.

Según Javier García Mateo, director de Análisis e Investigación de Mercados de Aguirre Newman, “el sector inmobiliario vive un momento de ajuste que, de momento, no ha llegado al negocio hotelero. Sí que está habiendo una estabilización pero no es preocupante. Habrá que ver cómo sigue evolucionando la economía internacional para poder saber en qué medida será afectado este mercado”.

Paloma Boceta explica que en 2008 las principales operaciones se han concentrado en hoteles ya construidos y “en zona prime, por lo que no se han producido descuentos al tratarse de un producto atractivo. En un futuro, el ajuste podría venir de las dificultades en la financiación y por el reducido número de inversores capaces de acometer el negocio con recursos propios”.

Por otro lado, el informe señala que la aparición de nuevos destinos turísticos más atractivos y rentables que España está motivando que muchas cadenas desinviertan en activos en el territorio nacional, un descenso en la competitividad española que, según la consultora, se mantendrá durante este año y 2009.

Futura oferta
En espera de ver cómo afecta la crisis a la concreción de los proyectos, actualmente se contabilizan en España un total de 644 desarrollos hoteleros con 81.300 habitaciones y una inversión total comprometida de 14.100 millones de euros. Los productos con mayor éxito seguirán siendo los hoteles urbanos de cuatro estrellas. De los proyectos previstos, el 22% serán gestionados por 14 cadenas hoteleras, siendo los grupos hoteleros nacionales los que van a gestionar tres cuartas partes de los hoteles en proyecto.

Destaca el escaso volumen de proyectos en Madrid, teniendo en cuenta el incremento de la demanda turística que ha experimentado la capital y, sobre todo, su elección como una de las ciudades candidatas a albergar los Juegos Olímpicos de 2016. El proyecto presentado por Madrid contempla una oferta de 65.805 habitaciones, de las que 50.000 estarán situadas a menos de diez kilómetros del estadio olímpico.

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