Ha obtenido 600 millones de plusvalías
Clara Pascual | Lunes 20 de octubre de 2014
La entidad financiera presidida por Emilio Botín ha culminado la operación de venta de la Ciudad Financiera de Boadilla del Monte al consorcio liderado por Propinvest. La transacción le ha costado al grupo británico 1.900 millones de euros.
El Banco Santander ha cerrado la venta de la Ciudad Financiera, localizada en Boadilla del Monte, al consorcio liderado por el grupo británico Propinvest.
Con varios meses de retraso, ya que la entidad liderada por Emilio Botín había acordado la venta en enero, con la expectativa de que la operación se ejecutase antes de marzo, la transacción le ha reportado al Santander 1.900 millones de euros, con lo que consigue unas plusvalías de 600 millones.
La causa del retraso en el cierre de la operación se ha debido a los problemas de financiación a los que se han enfrentado los inversores, que se ha visto incrementado por el importante montante necesario para hacer frente a la operación. Para compensar posibles retrasos la transacción, Propinvest ha teniddo que abonar al Santander 40 millones de euros que se descontarán del importe final.
Ahora, el banco de Botín mantendrá su sede en la Ciudad Financiera durante los próximos 40 años, condición acordada en enero, y pagará una cantidad cercana a los 80 millones de euros anuales. Transcurrido ese tiempo, el Santander puede ejecutar su derecho a comprar los edificios, tal y como recoge el acuerdo.
La operación, conocida como sell & lease-back, se enmarca dentro de la política emprendida por la entidad financiera de vender los edificios de su propiedad y posteriormente alquilarlos.
La Ciudad Financiera del Banco Santander fue diseñada por el arquitecto irlandés Kevin Roche y fue pensada para unificar los 23 edificios con que contaba la entidad en Madrid capital en una sola sede, con lo que se ahorraría en costes y se aumentaría la eficiencia de los trabajadores.
La construcción de la sede corporativa del Santander, que ocupa una superficie de 400.000 metros cuadrados construidos, dispone de más de 5.000 plazas de aparcamiento y alberga a 6.700 empleados, costó 480 millones de euros.