LA CERÁMICA APUESTA POR LA INNOVACIÓN
Redaccion | Lunes 20 de octubre de 2014
Presidente de Ascer
En los últimos años hemos podido observar cómo la demanda de cerámica en el mundo se incrementa de forma importante. Nos encontramos ante una industria con un futuro prometedor ya que existe un consumo garantizado en los países emergentes, sobre todo gracias las grandes cualidades técnicas del material. “Tile of Spain”, a modo de marca de origen, intenta posicionar al producto cerámico español como líder en innovación, tecnología y diseño. Y lo está consiguiendo. España es el primer productor europeo de baldosas cerámicas, por delante de Italia, y el segundo productor mundial, únicamente adelantado por China.
La economía española se sustenta gracias a determinados sectores influyentes y la industria cerámica es uno de ellos; este sector supone un 0,13% del total del PIB español y representa un 1,3% del total de las exportaciones. De la facturación global, cerca del 56% corresponde a las exportaciones que, en el ejercicio anterior, fue de 2.300 millones de euros, cuota que supone el 19% sobre el volumen de comercio mundial. Esta cifra se debe a los más de 190 países que importaron cerámica española y que permitieron que nuestras ventas internacionales crecieran un 5,4%.
Gracias a esta diversificación de mercados y a la solidificación del sector, en tiempos de crisis global, la industria cerámica sortea determinados obstáculos que se pueden presentar. De las ventas totales del ejercicio 2007, que ascendieron a una cifra de 4.120 millones de euros, 1.802 millones correspondieron a las ventas nacionales. Esto quiere decir que el 44% de la facturación total corresponde a las baldosas distribuidas en nuestro país. Es un porcentaje significativo que obliga a pensar en estrategias y soluciones que ayuden a capear la crisis económica presente en el mundo.
2008 es un año complicado para la industria española y todos y cada uno de los sectores tienen que apostar más que nunca por la I+D para aportar a nuestros productos un valor diferencial y añadido que permitan pensar a los consumidores en algo más que un bajo coste. China es el contrapunto; la apuesta por un bajo precio para competir en el mercado olvida la calidad del producto y esto, a largo plazo, resulta caro.
El sector cerámico español se caracteriza por ser altamente tecnificado. Ha ido evolucionando con la introducción de diferentes innovaciones que han permitido su rápido crecimiento y potencial. La evolución de la tecnología en procesos es tal que las empresas españolas están basando su diferenciación en el incremento del valor añadido del producto y de los procesos de comercialización.
Reflejo de esta evolución es que hasta hace unos años sólo se concebía la baldosa cerámica como un elemento de recubrimiento en el interior y exterior del hogar. Los nuevos usos y aplicaciones del material cerámico son claves en estos tiempos. La cerámica es un material versátil, un material de vanguardia que no ciñe su uso a la construcción de edificios. Se ha venido acentuando progresivamente una tendencia hacia la búsqueda de nuevos usos para los materiales tradicionales de construcción. Estas nuevas funcionalidades y aplicaciones están destinadas a mejorar aspectos directamente relacionados con la calidad de vida, las condiciones de habitabilidad o incluso el aprovechamiento de fuentes de energía naturales como, por ejemplo, la energía solar.
El futuro de la economía española es incierto ya que nos encontramos inmersos en un ciclo de cambio. El presente 2008 prevé ser un año de menor crecimiento respecto a los anteriores a nivel global. La capacidad de innovación del material cerámico y su crecimiento internacional en mercados tanto maduros como en desarrollo, permitirán que a este sector afrontar con garantías el actual escenario.