INMOBILIARIO

Chamartín busca centros comerciales para crecer en el mercado español

Sale a la caza de gangas en un entorno convulso

Redaccion | Lunes 20 de octubre de 2014
17/01/2008.- La inmobiliaria que preside Carlos Cutillas quiere aprovechar las dificultades de sus competidores para reforzarse en centros comerciales. La compañía tiene 2.000 millones para invertir en cinco años, en este segmento.

Los chinos no tienen la palabra "crisis" sino que usan un término que significa "oportunidad". Inmobiliaria Chamartín conoce bien esta doble cara de las situaciones convulsas y se ha pertrechado de recursos abundantes para cazar las gangas que lancen al mercado sus rivales, asfixiados por las deudas. La empresa de Carlos Cutillas ha puesto en su punto de mira los centros comerciales, en un intento más por reforzar su rama patrimonial.
La inmobiliaria española afirma contar con 2.000 millones de euros para reforzar la división de centros comerciales en Europa. España será uno de los destinos prioritarios de esta cantidad. No en vano, los centros Dolce Vita, la marca con la que opera Chamartín, prevé facturar entre un 30 y un 40% en cinco años.
En la actualidad, Chamartín sólo tiene tres centros activos en España, situados en Jerez (Cádiz), Alcobendas (Madrid) y Ferrol (La Coruña). Estos dos últimos se someterán a una profunda remodelación para actualizarse. Junto a estos proyectos, la firma acaba de adquirir unos terrenos junto al estadio de Valladolid para construir otro centro, que entrará en funcionamiento en 2010.
Los planes de Chamartín pasan por tener diez centros en España antes de 2012. Sin embargo, la crisis residencial que atraviesa el sector ha abierto los horizontes para la empresa, que reconoce estar dispuesta a estudiar operaciones corporativas por parte de otras inmobiliarias en busca de liquidez. "Estamos abiertos a cualquier oportunidad por crecer en España", confiesa Jaime Lopes, director general de la rama de centros comerciales.
El equipo responsable de Dolce Vita procede de Portugal en donde ha logrado que la enseña se haga hueco. De hecho, Dolce Vita es uno de los tres operadores más importantes del país, con once centros operativos.
El próximo paso que se ha propuesto la empresa es extender la fórmula de los centros portugueses, algunos premiados por el Internacional Council of Shopping Centers, a los otros países donde opera Chamartín. Así, ademása de España, en los próximos cinco años la empresa construirá nuevos centros comerciales en Alemania, Polonia e Italia. En un horizonte a más largo plazo, Jaime Lopes prevé empezar a operar en Rusia y Ucrania.

Noticias relacionadas