AUTONOMÍAS

MADRID.- 19/12/2007 Los arquitectos apoyan la remodelación del eje Prado-Recoletos

El número de carriles se reduce de cinco a tres

Redaccion | Lunes 20 de octubre de 2014
El Colegio de Arquitectos de Madrid está evaluando las consecuencias de la remodelación de los viales que pasan frente al Museo Thyssen. La asamblea ha mostrado su apoyo a la propuesta muncipal de ordenación, aunque introduciendo ciertos matices.

La remodelación de la avenida de Recoletos entre Cibeles y Neptuno es polémica, pero al menos el Ayuntamiento parece contar con el beneplácito del Colegio de Arquitectos de Madrid (COAM). Las tres corrientes representadas en la asamblea de este organismo expresaron recientemente su apoyo a la última propuesta presentada, que aleja el tráfico rodado de la fachada del Museo Thyssen.
En nombre de COAM Activo, el grupo mayoritario en el Colegio, Luis Rodríguez Avial se ha mostrado "muy favorable" a la propuesta final del equipo de Álvaro Siza y Javier Hernández de León, aunque ha señalado que para salvar una decena de árboles se ha obligado a los redactores a adoptar soluciones muy discutibles.
Por parte de COAM Somos Arquitectos ha intervenido José María Ezquiaga, que ha animado a sus colegas a "defender inequívocamente" el proyecto, pues lo considera el primero "importante" en que el Consistorio apuesta por el peatón, si bien cree que sólo es "viable" si se evita que el tráfico desviado del eje colapse las vías aledañas.
Finalmente, Javier Alau, de COAM Diverso, ha considerado "en principio deseable" que se reduzca la circulación en ambos paseos y ha destacado la labor de los "profesionales sensibles y competentes" del equipo redactor, pero ha criticado el "desequilibrio" entre las dos aceras entre Neptuno y Cibeles, así como los posibles prejuicios medioambientales para otras áreas de Madrid por el tráfico desviado.
Frente al apoyo, con matices, de los arquitectos oposición y grupos sociales han arremetido contra la propuesta del Ayuntamiento de Madrid, que pretende llevar los carriles en sentido norte por el lado contrario al Museo Thyssen una vez superada la plaza de Neptuno. La principal variación del proyecto de Álvaro Siza es que por delante del Thyssen pasarán tres carriles en sentido sur -dos generales y uno reservado para el transporte público- y no los cinco -es decir, esos y otros dos en dirección norte- que estaban previstos.