Redaccion | Lunes 20 de octubre de 2014
Los antiguos propietarios que fueron objeto de expropiación en los años 40 y 50 para la construcción de la Estación de Chamartín han alcanzado un acuerdo para vender sus derechos sobre los terrenos, pendientes de juicio, a una empresa gallega. Esta ha pagado 300 millones de euros por esos derechos.
El desbloqueo de la mayor operación urbanística del país podría producirse después del acuerdo alcanzado entre la Asociación de Reversionistas y una compañía que ha pagado 300 millones de euros por sus derechos sobre las tierras en las que se realizará este desarrollo. Dicha compañía que según algunas fuentes podría estar vinculada al empresario Manuel Jove (ex propietario de Fadesa y máximo accionista del BBVA), tendrá ahora que negociar con los gestores del proyecto. La sociedad gestora, Duch (Desarrollo Urbanístico de San Martín), está controlada por el BBVA (72,5%) y la constructora San José (27,5%).
La Asociación de está litigando para esclarecer sus derechos sobre este suelo después de que en 1993 Renfe convocara un concurso público para la construcción de un desarrollo urbanístico en la zona. De esta manera, el suelo, que fue expropiado para su uso público (la construcción de la estación) cambiaba de uso y se hacía urbanizable. Por esta razón, los antiguos propietarios, más de 1.000, se constituyeron en asociación para hacer valer sus derechos sobre este terreno y solicitar una compensación por ese cambio de uso que significará, sin duda, importantes beneficios económicos. Esos derechos, que todavía están en litigio, son los que ahora podría comprar una empresa por 300 millones de euros.
Una reunión entre 300 de los miembros de la Asociación ha dado como resultado la aprobación casi unánime del acuerdo de venta de los derechos, con los que la empresa tratará de alcanzar un acuerdo extrajudicial con los gestores.