Redaccion | Lunes 20 de octubre de 2014
Galicia cuenta con el mayor índice de radón, un gas radioactivo que produce el 10% de los cánceres de pulmón. Sin embargo, la futura normativa sobre edificación que prepara el Gobierno regional no especifica qué medidas deberían aplicarse para eliminar el radón, que es inodoro, de los edificios.
El Código de Edificación de Galicia se encuentra en la última fase de elaboración antes de que el Parlamento dé su visto bueno. Sin embargo, la norma que determinará las condiciones de los futuros inmuebles que se construyan, no realiza una especificación de las medidas que deben asumirse para eliminar el riesgo de contaminación por radón.
Este gas, muy abundante en la comunidad gallega y que es la causa del 10% de los cánceres de pulmón que se contabilizan en ella, carece de referencias concretas en el futuro Código, denominado "Normas do hábitat galego" y que se convertirá en la guía en la que deberán fijarse los constructores a la hora de levantar sus obras.
La normativa efectúa una pequeña mención al radón para explicar cómo se debe actuar para intentar controlar la presencia de este gas en las viviendas. De esta forma, se señala que para eliminar el 20% del radón se debe tener abiertas las ventanas, al menos, dos horas diarias, pero no se realiza ninguna mención de una de las medidas más importantes a la hora de suprimir el gas como es el aislar de manera conveniente el suelo del edificio para evitar las exposiciones al radón.
Galicia es uno de los puntos de España en el que el índice del radón es más elevado según demuestran los estudios llevados a cabo ya desde el año 1991 por el Fondo de Investigaciones Sanitarias. Tal y como aparece en los diversos análisis, la comunidad gallega cuenta con tasas de hasta 800 becquerels por metro cúbico de aire, cuando el Consejo de Seguridad Nuclear cifra en 200 becquerels, el punto en el que se sobrepasa la cantidad recomendada para que no traspase los índices de seguridad.