De la Vega: ¿dos por Madrid?

No se han apagado los ecos de la derrota del PSOE en la Comunidad y la capital de Madrid, incluidos los problemas que tuvo Zapatero para encontrar un candidato frente a Gallardón, cuando se vuelve a hablar de conflictos internos en La Moncloa para buscar un número dos para la lista de Madrid, que acompañe al presidente, tradicional número uno de los socialistas en la provincia.
Zapatero quiere que la vicepresidenta María Teresa Fernández de la Vega encabece la lista por Valencia, de donde se ha caído con todo el equipo la anterior protagonista, Carmen Alborch, que fue derrotada con claridad por Rita Barberá en las últimas elecciones municipales. Pero la "mujer fuerte" del Gobierno se hace la loca, lo mismo que cuando se habló de ella -tras la negativa de José Bono- como posible candidata a las elecciones municipales madrileñas para "parar" a Gallardón. Entonces no le dió a ZP la oportunidad de pedírselo oficialmente e incluso movió sus hilos para que las feministas escribieran cartas rechazando la posibilidad de que De la Vega dejara el Gobierno para presentarse a los comicios municipales.
Lo que quiere Teresa Fernández de la Vega -que en 2000 fue una especie de candidata paracaidista: por Segovia- es repetir por la lista de Madrid (donde en 2004 fue cuarta), pero ascendiendo a la segunda plaza que ahora ostenta la ministra de Educación Mercedes Cabrera, una mujer un tanto sosa, que no ha tenido ninguna intervención importante en el Congreso.
En 2004, Zapatero quiso haber tenido como número dos a María Jesús San Segundo, una candidata que le había propuesto Gregorio Peces-Barba, pero la catedrática de la Universidad Carlos III no quiso y entonces se barajó la posibilidad de que De la Vega subiera dos puestos, pero finalmente se optó por otra mujer del mundo de la Universidad, sobrina del ex presidente Leopoldo Calvo Sotelo.
De la Vega, que nació en Valencia, no quiere convertirse en una diputada cunera -que es como se llama a los que mandan a cubrir los puestos en las provincias donde nacieron- y prefiere ser ratificada como número dos de Zapatero, justo antes de que empiece la nueva legislatura, momento en que el presidente tendrá que tomar decisiones importantes sobre su futuro, si es que el PSOE vuelve a ganar. Habiendo sido vicepresidenta y poderosa son pocos los lugares que podría ocupar y alguno de ellos ya han sido comprometido por Zapatero a otros prebostes políticos, como la presidencia del Congreso, a la que opta sin lugar a dudas José Bono.