Moneo planta un "Bosque de Acero" junto al río Júcar
El arquitecto es el autor, junto con sus hijas, de la primera fase de ampliación del recinto ferial de cuenca
lunes 20 de octubre de 2014, 14:42h
12/12/2006.- El nuevo año siempre viene cargado de buenas intenciones para todos, incluidas las corporaciones municipales. Puede que haya sido la proximidad de la Navidad lo que ha hecho que la Mesa de Contratación del Recinto Ferial de Cuenca se haya decantado definitivamente por una de las propuestas planteadas para llevar a cabo su ampliación.
En este caso, la oferta que se ha hecho con el millonario contrato ha sido la de Acciona Infraestructuras, cuyo diseño es obra de Rafael Moneo y su equipo.
Si se cumple el calendario previsto, la primera piedra del "Bosque de Acero", nombre con el que se conoce el proyecto del arquitecto navarro, será colocada a mediados de enero. El edificio, un pabellón acristalado con estructuras de acero y vidrio que imitan la forma de un árbol, permitirá recuperar más de 37.000 metros de zona verde de ribera, ubicados entre los ríos Júcar y Moscas, y hará que se amplíe el actual recinto ferial, que pasará de contar con una superficie de 30.000 a 180.000 metros cuadrados útiles.
El presupuesto de adjudicación asciende a 7,2 millones de euros, mientras que el plazo de ejecución se prolongará durante siete meses, por lo que este particular árbol de acero y cristal, estaría listo antes de las fiestas de San Julián, que se celebran en la capital conquense a finales de agosto. La propuesta de Moneo superó a otras tres competidoras, la de Dragados, la de Brues y Fernández y la de una Unión Temporal de Empresas (UTE), integrada por tres compañías locales -Carrascosa de Cuenca, Conca y Sarrión-, que se barajaba como favorita en todas las quinielas.
El "Bosque de Acero", concebido por Moneo en colaboración con sus hijas Belén y Clara, vendrá a revitalizar el descuidado terreno sobre el que se asienta el recinto ferial. El proyecto ha sido definido por el autor del Kursaal de San Sebastián como "un proyecto público, en el mejor sentido de la palabra, y popular porque responde a la necesidad de dar alojamiento a actividades que surgen del encuentro espontáneo de las personas". El pabellón multifuncional busca estar en sintonía con la naturaleza que le rodea y por eso ha sido diseñado con esa peculiar forma que le asemeja a un árbol de acero y vidrio, ubicado en los meandros del Júcar. El origen del proyecto parte de la arquitectura industrial del siglo XIX, aunque rompe su modelo clásico para adaptarse al carácter pintoresco propio del entorno de la ciudad.
Las obras de construcción del pabellón, cuya superficie será de tres mil metros, de los que 1.600 estarán a cubierto, mientras que el resto estará al aire libre, serán financiadas en gran parte gracias al convenio firmado entre el Ayuntamiento conquense y el grupo de empresas constructoras Davecon.
La segunda fase de la ampliación contempla la creación de amplias zonas verdes, un estanque recreativo, que estará habilitado para recoger agua durante la temporada de lluvias y evitar posibles inundaciones, y una pista de patinaje. El lago artificial contará con su propio embarcadero y con un mirador similar al del Parque del Retiro de Madrid.
En las siguientes fases del proyecto se prevé la construcción de aparcamientos y locales comerciales, una zona para caravanas, un auditorio al aire libre con capacidad para nueve mil personas y un teatro para mil espectadores. Además, está previsto crear una zona de restauración junto a las ruinas de la antigua fábrica resinera.