Almería pone en marcha la mayor desaladora de Europa

La ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, ha sido la encargada de inaugurar oficialmente la desaladora de Carboneras, un proyecto iniciado en febrero de 2001. Han sido cuatro años de intenso trabajo, que han supuesto una inversión de 254 millones de euros, entre planta y conducciones. Esta cantidad ha sido financiada a través de la sociedad estatal Aguas de la Cuenca del Sur (Acusur), con el 25% del total, una aportación del 50% procedente de fondos europeos, y otra de los usuarios, que alcanza el 25% restante.

La instalación, la mayor de Europa en su género, abastecerá a una población residente de más de 120.000 habitantes y garantiza el riego a más de 7.000 hectáreas del Campo de Níjar.

Diseñada para producir hasta 42 hectómetros cúbicos anuales, la planta podrá tratar un volumen de agua cercano a los 120.000 metros cúbicos diarios, beneficiando a más de una docena de municipios. De un lado, Níjar, y por otro, los del levante almeriense y el bajo Almanzora, como Antas, Bédar, carboneras, Cuevas de Almanzora, Los Gallardos, garrucha, Huércal-Overa, Mojácar, Pulpí, Turre, Vera, Taberno y Sorbas. Además, es posible que se conduzca el agua hasta el Campo de Tabernas, beneficiando a las localidades de Gérgal, Lubrin, Lucainena de las Torres, tabernas, Tahal y Uleila del Campo.

La desaladora emplea la técnica de ósmosis inversa, para lo que cuenta con un conjunto de 12.100 membranas, repartidas en 12 bastidores, que son las que eliminan la sal del mar.