El plan de remodelación del eje Recoletos-Prado echa a andar

El plan especial para la remodelación del eje Recoletos-Prado ha sido aprobado y se mantiene en periodo de información pública. Una exposición en el edificio de Gran Vía, 24 permite conocer todos los detalles de un ambicioso proyecto que afecta a un trazado de cinco kilómetros de longitud y que tiene como principal objetivo recuperar espacios para el peatón.

La Junta de Gobierno, presidida por el alcalde, Alberto Ruiz-Gallardón, ha dado luz verde al proyecto vencedor del concurso internacional de ideas convocado por el Consistorio. La propuesta del arquitecto portugués Alvaro Siza elimina barreras arquitectónicas y otras disonancias que han ido apareciendo en este ámbito con el paso del tiempo.

El centro de la plaza de Colón volverá a estar ocupado por la estatua del descubridor que le da nombre. Se recuperará, por tanto, el trazado original de 1892, y se suprimirán las fuentes actuales. Al Centro Cultural de la Villa se accederá por la propia superficie de la plaza a través de una nueva construcción, mientras que el subterráneo que comunica ambas aceras de la Castellana se convertirá en centro de información turística.

En el paseo de Recoletos se ampliará la acera del lado este, y se concentrará el tráfico en el oeste, mientras en la plaza de Cibeles se ampliará el anillo perimetral para los peatones. En la plaza de la Lealtad se construirá un aparcamiento de autobuses turísticos. Un amplio paso de peatones unirá el Museo Thyssen y el Prado. El proyecto incluye una reordenación de la plaza de las Cortes y la peatonalización completa de la Cuesta de Claudio Moyano.

Apuesta verde.- Se van a plantar 3.000 nuevos árboles, y se crearán nuevas zonas verdes, pero lo más reseñable será la ampliación del parque del Retiro. La intención es hacerlo accesible para los habitantes del sur, por lo que el equipo de Siza ha planeado construir un ascensor en el Cerrillo de San Blas, al que se tendrá acceso desde la calle Infanta Isabel.