La familia Sanahuja reajusta su imperio inmobiliario

La saga de los promotores Sanahuja está recomponiendo su conglomerado de empresas. Su objetivo es remontar el vuelo, tras el desplome que algunas de ellas experimentaron en 2010 y desembocaron en una cadena de suspensiones de pagos con deudas de 2.600 millones de euros.

Esos percances figuran en el podio de los más abultados que nunca se declararon en España, después de la madrileña Martinsa Fadesa, perteneciente a Fernando Martín, y el de la catalana Habitat, de las familias Suñol y Figueras.

Ahora, acaban de fusionarse tres de las compañías del imperio Sanahuja que se salvaron de aquel fallido. Se trata de las promotoras Inmobiliaria Sanahuja 2 y Urbanizaciones e Inmuebles, de un lado; e Indicesa l’Illa, titular de una parte del complejo comercial y de oficinas l’Illa Diagonal (Barcelona), de otro.

En virtud del reajuste, Indicesa l’Illa ha absorbido a las otras dos compañías, que se han extinguido.

Beneficios de cuatro millones

Inmobiliaria Sanahuja 2 y Urbanizaciones e Inmuebles lucen balances muy saneados y prácticamente carecen de endeudamiento. El año último obtuvieron un beneficio agregado de 4,2 millones. Suman unos activos de 160 millones de euros y un patrimonio neto de 150 millones, que ahora pasan a engrosar el balance de la entidad absorbente.

Por su parte, Indicesa l’Illa se dedica a alquilar los espacios comerciales y de oficinas del conocido recinto de la Diagonal, entre Numància y Entença. En 2013, Indicesa ingresó 17 millones por los arrendamientos, cifra análoga a la del año anterior, con un resultado neto de 5,2 millones. Sus recursos propios alcanzan los 107 millones.

De la gestión de Indicesa se encarga Ángeles Sanahuja Pons, por medio de una sociedad de cartera domiciliada en Alcorcón (Madrid).