¿Quién da más?

Tras pasar un periodo de casi cuatro años en el que la vivienda había desaparecido de la primera plana del panorama político español, este asunto ha vuelto a sonar con más fuerza que nunca. Se ha puesto en marcha una subasta de propuestas y promesas electorales, más bien electoralistas, iniciada por el Gobierno de la nación y continuada, entre otros, por el presidente de la Junta de Andalucía, Manuel Chaves, que más bien parece que se presenta a sus primeras elecciones, en vez de ser el presidente autonómico que más tiempo lleva en el cargo.
Chaves ha unido a sus propuestas estrella sobre la vivienda la genialidad de la paga a los escolares para que no abandonen los estudios. No parece que vaya con él la idea impulsada por el presidente de Francia, Nicolas Sarkozy, de fomentar el esfuerzo, sino al contrario la de instaurar un nuevo PER, en este caso, escolar.
Pero volviendo al asunto de la vivienda, el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero presentó al principio de la legislatura sus iniciativas referentes a este sector. Entre estas iniciativas estaba la que pretendía favorecer el alquiler frente a la compra. A tenor del plan también de alquiler presentado ahora por la nueva ministra de Vivienda, Carmen Chacón, el anterior, que había elaborado María Antonia Trujillo, o bien no ha valido para nada o bien lo que se ha hecho ahora es un remiendo o continuidad del anterior.
Habría que preguntarse o, mejor, preguntarle al Gobierno, para qué ha servido el presupuesto invertido en la Sociedad Pública de Alquiler, qué consecuencias ha tenido, cuántas viviendas en renta ha puesto en el mercado, qué coste ha supuesto por vivienda con relación con lo invertido...
El Partido Popular ha reaccionado y ha presentado las medidas que pondría en práctica en el caso de ganar las próximas elecciones generales. Ahora está en los ciudadanos, sobre todo en los que más necesitan las políticas de vivienda, decidir quién les aporta más fiabilidad.